La Policía Nacional Civil (PNC) en conjunto con el personal de la Fuerza Armada capturó, en el marco de Semana Santa, a un total de 177 remanentes de la Mara Salvatrucha, pandilla 18 y otras estructuras terroristas a escala nacional.
El ministro de Seguridad, Gustavo Villatoro, aseguró que los capturados están debidamente investigados, están tatuados como pandilleros, y no son casos como afirma la oposición y grupos de ONGs pro-pandilleros, que la Policía detiene a su antojo o por la apariencia de las personas.
«Dicen que nosotros andamos capturando gente por apariencia, porque usan gorra plana, porque visten algún tipo de zapato en especial o ropa floja», enfatizó Villatoro.
El funcionario lamentó que los opositores se olvidan de esos 20 años de justicia penal perversa que heredaron a los ciudadanos, «y ¿dónde encontramos el récord de todo eso? ¿Por qué los asociamos? Porque entraban y salían del sistema judicial y ¿Quién nos va a negar que es un pandillero?», cuestionó Villatoro.
El titular de Seguridad aclaró que la principal incriminación para un pandillero son los homicidios, extorsiones, tenencia de armas, tráfico de drogas, aparte de los tatuajes. Reiteró que para ser un «homeboy» o para iniciarse, un pandillero solo tiene un requisito: matar.
Según datos de Seguridad, el cerco de seguridad establecido en Chalatenango Sur ya registra 52 pandilleros arrestados en los cuatro distritos donde se mantiene la medida desde la semana pasada.
Más de 79,000 terroristas detenidos
El martes 2 de abril, el ministro informó que entre el 27 de marzo de 2022 a marzo de 2024 han detenido a 79,184 terroristas de las diferentes estructuras.
El funcionario detalló que en procedimientos ocurridos en lo que va del combate a las pandillas les han decomisado 3,965 armas de diferentes calibres,8,122 vehículos y 20,140 celulares. Explicó que el total de mareros arrestados representa el 75 % del registro que tenían de esas estructuras terroristas y solo falta detener al resto, que serían un aproximado de 25,000 pandilleros.
Con respecto a los celulares confiscados, el titular de Seguridad afirmó que ha servido como prueba del cometimiento de delitos y su pertenencia a la estructura criminal.
«Al final era uno de los elementos de principales de comunicación, esta estructura sin teléfonos no es nada. Todas las experticias que se hacen a cada uno de esos teléfonos, hemos compartido con la Fiscalía, uniendo capacidades tecnológicas Fiscalía-Policía, precisamente para hacer todas estas extracciones y poder establecer la pertenencia de alguien a la organización», reiteró.