Enero y febrero de 2023 se convirtieron en los meses más seguros de la historia reciente de El Salvador, al totalizar 27 homicidios, de acuerdo con los datos de la Mesa Técnica Interinstitucional para la Conciliación de Cifras de Víctimas de Homicidios y Feminicidios.
Ese registro de 27 homicidios contrasta con las 1,404 muertes violentas reportadas durante el mismo período en 2016 en el gobierno del FMLN mandatado por el prófugo Salvador Sánchez Cerén.
A la luz de los datos se demuestra que la estrategia de seguridad ideada por el presidente Nayib Bukele en junio de 2019 a través del Plan Control Territorial (PCT) y reforzada a partir de finales de marzo del año pasado con el combate frontal a las maras ha traído los años más seguros para todos los salvadoreños.
«Hemos transformado el país más inseguro del mundo, en el más seguro de América Latina. Seguimos…», escribió recientemente el mandatario Bukele en su cuenta de Twitter.
La sólida estrategia de seguridad ha traído tranquilidad a la población honrada que ya para enero y febrero de 2020 percibieron una importante reducción de los asesinatos pues se registraron 243 versus los 495 totalizados en ese mismo periodo de 2019 cuando todavía gobernaba el FMLN.
Para 2021 y en ese mismo periodo fueron 218 y para 2022 las autoridades registraron 163 muertes violentas.
El ministro de Justicia y Seguridad Pública, Gustavo Villatoro, ha manifestado que la disminución drástica de los homicidios se debe al liderazgo y visión del presidente Bukele en la lucha contra el crimen, los cuales están demostrando que sí es posible construir un país más seguro y justo cuando se trabaja por los derechos y la vida de la población honrada.
«Las acciones implementadas en el marco del #RégimenDeExcepción nos continúan brindando resultados contundentes. Y no vamos a detenernos, seguiremos haciendo #justicia en nombre de millones de salvadoreños», expresó el titular de Seguridad.
Los registros oficiales dan cuenta que entre el 1° de enero al 14 de marzo de este año se registraron 41 homicidios a escala nacional, es decir un 79 % menos que los 200 acumulados en el mismo periodo del año 2022. De acuerdo con las proyecciones, al ritmo actual con la disminución histórica de crímenes sangrientos, El Salvador cerraría 2023 con 205 homicidios, lo que representa una tasa de 3.2 homicidios por cada 100,000 habitantes.
Lo anterior demuestra que, sobre el primer trimestre del 2023, la administración Bukele ha mantenido una reducción sostenida en las muertes causadas por la situación de violencia generada por los grupos de pandillas que se vivió por décadas y que fue alimentado por la ineficiencia de los gobiernos de ARENA y el FMLN que, además, pactaron con los grupos terroristas a cambio de apoyos electorales.
El combate frontal a las pandillas ya suma 65,795 pandilleros y colaboradores de las diferentes estructuras criminales arrestados. De esta forma, el Gobierno afirma categóricamente que está ganando la batalla a los grupos criminales, que por años les arrebataron la vida a millares de personas honradas.
Con la ejecución de todo un plan integral se ha logrado recuperar los territorios, se han atacado las finanzas de las maras con la incautación de más de $3 millones producto de la extorsión y venta de drogas.
El presidente Bukele y su Gabinete de Seguridad mantienen su objetivo principal que es proteger la vida y el bienestar de la población, por sobre todas las cosas. Las autoridades afirman que el compromiso sigue siendo establecer las medidas para el beneficio de los salvadoreños.
El trabajo del mandatario es reconocido a nivel internacional y una reciente encuesta de un medio opositor reveló que el 91 % de los salvadoreños aprueba la gestión del presidente Bukele y una de las grandes mejoras que visualizan son las relacionadas al tema de seguridad.