Antes de tomar el último avión para Cartagena, en Murcia, España, el volante de la Azul, Enrico Dueñas atendió a «Diario El Salvador». «Me siento feliz de haberme ido de Vitesse». No es para menos, en ese equipo de la primera división neerlandesa había tenido escasa participación.
Dueñas sale de la última escala hacia España, con mucha ilusión. Firmó por dos años con el Cartagena B, del ascenso de España. Ahora no se anda fijando si es ascenso o categoría de honor, lo que quiere el cuscatleco es jugar, jugar y jugar. Entiende que es lo que necesita un jugador habilidoso como él.
«Al Vitesse no le gustan los jugadores habilidosos como yo. Por eso nunca tuve chance ahí. No entienden a los jugadores como yo. En ese equipo solo les gustan los jugadores sencillos», dijo el centrocampista que estuvo toda la octogonal final de la Concacaf con la Azul. Solo se perdió, por lesión, los choques contra Jamaica y Costa Rica, en marzo de este año.
Dueñas lleva su equipaje lleno de ilusiones a otro reto en su carrera. Ahora solo quiere minutos para no perder forma física y técnica. En agosto de 2021 hasta finales de ese año, el centrocampista se fue al Eindhoven, de la segunda categoría neerlandesa.
«Espero tener confianza en Cartagena, Tengo necesidad de eso. Esta oportunidad me llega por los juegos con la selección de El Salvador y algunos con Eindhoven», externó el jugador de la selección mayor de El Salvador, quien insistió en que firmó por dos años con el equipo de la región autónoma de Murcia.