La selección mayor trabaja desde este lunes en su tercer microciclo de preparación para los juegos eliminatorios contra Islas Vírgenes Estadounidenses [5 de junio] y Antigua Barbuda [8 de junio]
Para esta nueva etapa de labores, el seleccionador mayor, Hugo Pérez, echó mano de los legionarios Joshua Pérez, del Ibiza español, Nelson Bonilla, del Thai Port tailandés, Alexánder Larín, del Xelajú guatemalteco y Erick Rivera, del Aurora boliviano.
En el caso de Rivera llegó al país desde el pasado jueves, luego de que el certamen boliviano entrara en receso, por la Copa América 2021. El atacante ha tenido participación con su equipo y ahora viene a dar su aporte al combinado mayor que se jugará el próximo mes todas sus opciones de avanzar a la próxima ronda de la eliminatoria a Catar 2022.
«De parte de mi equipo no hubo reparos para cederme con anticipación, porque nostros hemos quedado libre ahora por la disputa de la Copa América y el torneo se va a reanudar hasta finales de julio. Yo me he costeado el viaje desde Bolivia para estar con la selección. Hay que ir a buscar un puesto en la selección y tratar de agradar al seleccionador, con trabajo », dijo el atacante cuscatleco, en plática con «Diario El Salvador».
Este es el segundo llamado a la Azul para Rivera, luego de que fuera tomado en cuenta por Carlos de los Cobos, para los eliminatorios de marzo, contra Granada y Montserrat. Pero solo estuvo disponible para el primer choque, dado que no viajó a Curazao, para el compromiso ante Montserrat.
«Ahora estamos seis delanteros buscando un puesto. Desde que comenzó esta eliminatoria sabíamos que era ganar o ganar para nosotros, para no complicarnos, pero lastimosamente empatamos uno [contra Montserrat, por 1-1] Ahora hay que trabajar para ganar los dos juegos que restan», externó el delantero del Aurora boliviano.