La leche materna está diseñada de manera perfecta para suplir las necesidades inmunológicas y nutricionales de la niñez. Además, se trata de un alimento completo para el bebé, ya que es rica en vitamina A, vitaminas del complejo B, vitamina C, hierro, fósforo, calcio, proteínas, grasas y azúcares. Adicional a estos atributos, la lactancia materna fortalece el vínculo afectivo madre hijo a través del amamantamiento. La primera semana de agosto se conmemora en todo el mundo para recordar su importancia para la vida.
Cabe recalcar que El Salvador asumió el pasado 16 de mayo el rol de guardián de las salas de lactancia materna de la sede de la Organización de las Naciones Unidas, en New York, Estados Unidos, donde la primera dama de la república, Gabriela de Bukele, asistió al acto de inauguración de los nuevos espacios.
De los 193 países que integran la Organización de las Naciones Unidas, El Salvador y Nueva Zelanda han sido asignados como guardianes, lo que implica: el diseño de los espacios y brindar asesoría e información sobre lactancia, método de refrigeración, calentamiento de la leche, entre otros.
La lactancia materna es uno de los indicadores que se monitorean en la ley Nacer con Cariño, y los resultados permiten conocer el estado de la salud materno-infantil. Esto se realiza desde una sala situacional a nivel nacional y desde encuestas a las madres atendidas en las maternidades del Sistema Nacional Integrado de Salud (SNIS).