La Empresa Transmisora de El Salvador (ETESAL) llevó a cabo el mantenimiento preventivo de la subestación San Miguel, una de las infraestructuras clave para el suministro eléctrico en la zona oriental del país.
La compañía indicó que con esta intervención se busca garantizar la operación confiable y eficiente de los equipos, así como prolongar la vida útil de la infraestructura.
Asimismo, comunicó que la subestación San Miguel beneficia a más de 202,653 usuarios residenciales, industriales y comerciales. «Esta subestación recibe energía de la Central Hidroeléctrica 15 de Septiembre y la Central Geotérmica Berlín, y tiene la capacidad de alimentar otras subestaciones clave en la región, como Ozatlán, en Usulután, y La Unión, en el departamento de La Unión», añadió.
De manera paralela, los especialistas de ETESAL en la zona occidental llevaron a cabo el mantenimiento preventivo de la línea de transmisión de 230 kV entre la subestación Ahuachapán y Energía del Pacífico (EDP), el primer proyecto de gas licuado ubicado en el Puerto de Acajutla.
«Las líneas de transmisión de 230 kV conectan a El Salvador con el resto de la región a través del Sistema de Interconexión de los Países de América Central (SIEPAC), lo que permite a El Salvador participar activamente en el mercado internacional de energía», indicó ETESAL.
Además, afirmó que el mantenimiento preventivo de las subestaciones y las líneas de transmisión no solo asegura el funcionamiento adecuado de la infraestructura de ETESAL, sino que también facilita que los socios distribuidores de la empresa realicen mantenimiento a sus propios equipos, permitiendo así una coordinación que optimiza la confiabilidad del servicio eléctrico en el país.
Para llevar a cabo este mantenimiento, ETESAL movilizó a más de 80 especialistas de diversas áreas, provenientes del Complejo Técnico Soyapango, del Complejo Técnico San Miguel y del Complejo Técnico Santa Ana.