FAS endulzó a sus hinchas con una pretemporada casi perfecta. Así, las expectativas crecieron a todo vapor. Por ahora, el equipo no vuelve a su nivel que lo llevó al título en el Apertura, pero sabe ganar, aunque sea bajo presión.
Hace una semana perdió el denominado clásico nacional, contra Águila, y este domingo tuvo que esperar hasta la segunda parte para imponerse 2-0 a Platense, que le dio batalla.
Fue el segundo triunfo de los asociados en el certamen para llegar a 7 puntos y quedar a tres del los líderes, Águila y Alianza.
Sin embargo, FAS no dejó satisfacción en su gente, que sigue exigiendo ver al último campeón nacional. Le costó mucho trabajo imponerse a los de Zacatecoluca.
Nada fácil
Platense no llegó a regalar nada al Óscar Quiteño. En el arranque cerró todos sus accesos al área y mermó la intensidad del ataque del local, que de nuevo volvió a jugar bajo la presión de su gente, lejos de sentir ese calor.
El estandarte del ataque de los tigrilos iba a a ser el argentino Matías Gómez. Giró por todo el medio campo para darle amplitud al fútbol de los asociados, pero no era lo suficiente para abrir el arco de Yimmy Cuéllar.
Luego, Platense también llegó a proponer, más aún cuando se dio cuenta de la impotencia de los asociados. Así, apareció Andrés Hernández, quien con pie educado, le dio trabajo a Kevin Carabantes.
En la segunda parte, FAS estaba apurado y generó llegadas sobre el arco rival, pero todo sin éxito.
Fue hasta el 72′ cuando Ibsen Castro rompió el cero y dio la ventaja a los tigrillos. Fue un gol aliviador para los santanecos, que ya tenían arriba de la nariz las aguas de presión de su hinchada.
Luego, al 89′, llegó Rolando Blackburn para el 2-0 definitivo. El canalero puso su sello a la pizarra. Así, la afición de los asociados volvió a la calma.