El gobierno finlandés anunció el jueves que algunas restricciones vinculadas al coronavirus serán levantadas antes de lo previsto ante la disminución de la presión sobre el sistema sanitario a pesar de la ola de ómicron en Europa.
«La carga sobre los hospitales se mantiene elevada, pero los casos más graves están cayendo y la situación ha mejorado en los cuidados intensivos», escribió la ministra de Sanidad, Hanna Sarkkinen, en un comunicado en Twitter.
Los bares, sin embargo, deberán seguir cerrando a las 6:00 pm y parar de servir alcohol a las 5:00 pm.
El país escandinavo de 5,5 millones de habitantes se mantiene entre las tasas de incidencia más bajas de la Unión Europea, pero el número de infecciones aumentó en las últimas semanas por la variante ómicron.
El gobierno impuso restricciones en diciembre y las amplió el 18 de enero con la previsión inicial de mantenerlas hasta mediados de febrero.