Después de la misa funeral, los feligreses realizaron una procesión por las calles del centro histórico de San Salvador para despedir a Monseñor Fernando Sáenz Lacalle, quien fue el arzobispo emérito de San Salvador.
El cuerpo del religioso fue ubicado en la cripta del sótano de la catedral, mismo lugar en que se encuentran los restos de San Óscar Arnulfo Romero.
Monseñor Fernando Sáenz Lacalle desempeñó el cargo como Arzobispo de San Salvador en las décadas de los 90 y los 2000, y falleció a los 89 años de edad en La Libertad.
El arzobispo emérito de San Salvador nació el 16 de noviembre de 1932 en Cintruénigo, una villa y municipio de la Comunidad Floral de Navarra, España