Pese a la esperanza por el avance con las campañas de vacunación, el mundo continúa muy vulnerable a la pandemia de covid-19, y países como Brasil y Francia han reimpuesto en las últimas horas restricciones focalizadas por el repunte del virus en algunas regiones.
Ante las sucesivas oleadas del virus, los países continúan reaccionando con restricciones, a la espera de que algún día las campañas de vacunación den inmunidad suficiente a sus poblaciones.
En Francia, el gobierno activó a partir de este fin de semana medidas concentradas en departamentos bajo vigilancia por su alto número de contagios, y por ejemplo Niza y su famoso Paseo de los Ingleses en la costa Azul, en el sur del país, quedaron confinados durante el fin de semana.
«Si es necesario hacer esto para poder tener un poco más de libertades luego, ¿por qué no?, dijo Frédérique Duval, diseñadora de indumentaria de 51 años respirando el aire fresco al borde del mar, el sábado por la mañana en Niza».
Otro país de Europa que decidió adoptar nuevas medidas es República Checa, que se reconfina a partir del lunes para intentar frenar su tasa de contagio por habitante, la más alta del mundo en estos momentos.
ALERTA EN BRASIL
En Brasil, varios gobernadores y alcaldes anunciaron nuevas restricciones para evitar el colapso sanitario ante el repunte de la pandemia del coronavirus, que ya deja más 250.000 muertos.
El gobierno de Sao Paulo, el mayor y más rico estado de Brasil, oficializó el viernes un retroceso en su plan flexibilización y redujo todavía más el horario de bares y restaurantes, que ahora sólo podrán funcionar hasta las 20h.
Los estados de Paraná y Rio Grande do Sul resolvieron que sólo funcionarán los servicios esenciales, es decir, farmacias, hospitales, supermercados, veterinarias, puestos de servicio, entre otros.
En Brasilia, el gobierno regional decretó a partir del domingo el cierre de escuelas, comercios y emprendimientos no esenciales, tales como cine, teatros y gimnasios.
Del otro lado del mundo, en Nueva Zelanda, la primera ministra Jacinda Ardern ordenó este sábado que la mayor ciudad del país, Auckland, vuelva a ser confinada debido a la aparición de un nuevo caso.
El covid-19 ha contagiado a más 113 millones de personas y dejado más de 2,51 millones de muertos desde diciembre de 2019, cuando fue detectado en China, según un balance de la AFP de este sábado basado en cifras oficiales.