Magaly Ortega es docente de la Universidad Evangélica de El Salvador (UEES) y comentó a «Diario El Salvador» su experiencia de haber recibido la primera dosis de la vacuna Coronavac, de Sinovac, como parte de la estrategia de inmunización a los maestros universitarios que inició el pasado jueves.
«Fue algo que no me esperaba porque yo soy docente hora-clase, y me parece una buena iniciativa que nos hayan tomado en cuenta, incluso a los que somos docentes hora-clase y no somos parte de una planilla. Es algo muy importante porque uno se siente más tranquilo, aunque no hay que confiarse. Considero que están haciendo un muy buen manejo de la base de datos de la población y que están priorizando de la manera que debe ser», manifestó Ortega.
Añadió que el proceso para la aplicación fue rápido y ordenado, desde el momento que le fue notificada la fecha en la que se le aplicaría la vacuna en la Unidad de Salud de Mejicanos, donde asistió el pasado viernes 9 de abril.
«La universidad nos envió un correo electrónico indicando que el ministerio [de Educación] se había contactado con ellos para que nos hiciéramos presente a la unidad de salud de Mejicanos, que lleváramos nuestro DUI y el carné de la universidad y con eso nos iban a vacunar. El proceso fue súper rápido, la cita era a las 10:00 A.M, y yo a las 11:30 A.M ya estaba afuera. Había varios [docentes], éramos de distintas universidades», destacó.
Asimismo, explicó que después de la aplicación del fármaco no tuvo mayores efectos secundarios, más que uno de los que le fue notificado por el personal de salud del centro de vacunación donde asistió.
«Solo tuve dolor de brazo que fue solo el resto del día, de hecho, fue uno de los efectos que me mencionaron durante sesión informativa [previa a la vacunación]. Yo en un inicio tenía miedo, pero creo que el miedo se basa en el desconocimiento, es importante informarse e informar a la población. A veces nosotros mismos también nos encargamos de viralizar cosas que a veces generan miedo. Pero con base en mi experiencia, a mi no me dio ningún efecto y animo a las personas a que se vacunen, y como dicen “la peor vacuna es la que no se pone”», indicó la docente.
De igual forma, como maestra instó a los jóvenes y a la población en general a continuar cumpliendo las medidas de bioseguridad y no confiarse.