Con el paso de los años, las personas de la tercera edad dejan de ser autónomos, o simplemente enferman y necesitan más cuidados habituales, razón por la que muchos familiares deciden ingresarlos en hogares especializados.
Ese es el caso de 18 personas de la casa de adultos mayores Nuestra Señora de la Merced, en Alegría, Usulután, quienes por circunstancias de la vida fueron olvidados en hospitales o simplemente abandonados por sus familiares.
El hogar Nuestra Señora de la Merced abrió sus puertas hace cinco años y desde esa fecha se dedicó a buscar apoyo con diferentes instituciones para proyectos que beneficiaran a los ancianos. Una de estas instituciones ha sido FUNDAGEO, que recientemente instaló un sistema de calentamiento de agua.
Sor Enauri Bolaños, encargada del hogar, aseguró que el sistema de calentamiento permitirá que los residentes del hogar puedan ducharse por la mañana y no tengan ninguna consecuencia debido a las bajas temperaturas (que pueden llegar hasta los 10 °C) que se registran en la zona.
«Los abuelos están contentos porque tienen agua calientita. Les agradecemos de corazón, por el beneficio de los abuelos y el bienestar de todos en el hogar. Este proyecto se realizó para el bien de los abuelos, para que la salud se mantenga sana y que sea factible su estadía en el lugar», agregó la religiosa.
Por su parte, Stephanie Daboub, directora ejecutiva de FUNDAGEO, comentó que la institución se unió al proyecto para poder dignificar con respeto las condiciones de los residentes de la casa hogar y así mejorar su calidad de vida
La ejecutiva explicó que el proyecto consistió en la instalación de calentadores del sistema de agua caliente para la zona de duchas de hombre y mujeres, colocación de calentadores de agua, cableado, desde tanques a sistema, conexión eléctrica, instalación del sistema en duchas con sus mezcladores de control de agua.
La FUNDAGEO contribuyó con la inversión del 100 % del proyecto, como parte del trabajo que desarrolla en las zonas aledañas a las centrales geotérmicas.
«Los abuelos están contentos porque tienen agua calientita. Les agradecemos de corazón, por el beneficio de los abuelos y el bienestar de todos en el hogar. Este proyecto se realizó para el bien de los abuelos, para que la salud se mantenga sana y que sea factible su estadía en el lugar».
Sor Enauri Bolaños, encargada del hogar.