Maquinaria del Ministerio de Obras Públicas (MOP) está siendo utilizada para construir bordas en el sector del caserío Los Llanitos, en el cantón La Canoa, en el municipio de San Miguel, como parte de los trabajos que llevan a cabo desde diciembre en 12.7 kilómetros del río Grande, luego de los estragos de la tormenta Julia en octubre del año pasado.
Debido al desbordamiento el río dejó su cauce natural o antiguo y tomó un nuevo rumbo en el sector de la comunidad Nuevo Amanecer, cercano a Santa Fidelia, en el cantón La Canoa.
«El cauce antiguo se fue azolvando hasta el punto de que el río tomó otra dirección e hizo un nuevo cauce. Lo que se pretende es recuperar el cauce natural y antiguo del río, donde se ha estado trabajando. Esperamos que en unas dos semanas esté culminada esa obra», explicó el jefe de Protección Civil, Óscar Portillo.

La maquinaria del MOP ha recuperado cerca de cinco kilómetros del cauce natural y los trabajos consisten en ampliar el canal del paso de agua entre 25 y 35 metros de ancho, así como desazolvar el terreno y la construcción de bordas.
Las obras de control de inundaciones en la zona baja del municipio en los cantones La Canoa y El Brazo se ejecutan debido al convenio suscrito entre la alcaldía de San Miguel y el Ministerio de Obras Públicas (MOP).
«El MOP ha destinado para el proyecto maquinaria, equipo y personal, y la alcaldía los ha apoyado con insumos como combustibles, lubricantes y alimentación para las personas que realizan esta importante labor en el río Grande», señaló Portillo. Son cerca de 450 familias de la zona beneficiadas con estos trabajos.