El Ministerio de Hacienda lanzó esta mañana la Unidad de Repatriación de Evasión Fiscal (UREF), con la que buscan recaudar $100 millones anuales solo en evasión fiscal que tengan empresas salvadoreñas en el exterior.
La UREF será la encarda de monitorear, con el uso de la inteligencia fiscal y estudios tributarios, todas aquellas operaciones que tienen empresas salvadoreñas con paraíso fiscales, para lo cual tiene previsto denunciar 150 casos de fiscalización.
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Los casos serán presentados ante las Fiscalía General de la República (FGR), específicamente cuando presenten «operaciones sospechosas de traslado de beneficios o de erosiones de la base fiscal hacia regímenes de baja o nula a tributación».
El director general de Impuestos Internos, Rubén Ordónez, indicó que la meta monetaria es de $100 millones al año, con un promedio de $670,000 por caso. «Estas operaciones son altas y lo decimos con toda propiedad, porque hemos hecho análisis fiscal», aseguró.
La cartera de Estado dijo que, aunque $100 millones es una cifra muy alta, se buscará trabajar para que se cumpla y que se hará bajo los principios que tiene la administración tributaria: legalidad, justicia e igualdad.
Por su parte, el ministro de Hacienda, Alejandro Zelaya dijo que se está marcando historia en el país y un precedente en el combate a la evasión.
En su opinión, se debe de contar con todas las herramientas para combatir la evasión y dar un alivio a la economía de los salvadoreños.
«Hoy es un día muy importante, estamos marcando un precedente en la lucha anti evasión no solo en nuestro país sino en todo Centroamérica y América Latina. Este flagelo ha mantenido a El Salvador en el subdesarrollo, y es momento de ponerle un alto», dijo Zelaya.
Además, añadió que los gobiernos anteriores permitieron un flujo de casi $2,000 millones anuales en evasión fiscal, «ya demostraron que tienen un pacto entre ellos para no ir tras este delito».
«Nosotros estamos convencidos que la única ruta para recuperar los ingresos, sin golpear la economía, es combatir la evasión fiscal», aseguró Zelaya, quien además, reafirmó que el Gobierno no tiene pensando aumentar ninguno de los impuestos a los salvadoreños.
Hacienda informó que hasta el momento tiene detectadas 270 empresas que están bajo un esquema similar de evasión fiscal, pero hay que verificar si hay contrato de «asesoramiento de transacciones» y «comisión por», y revisar si los costos son necesarios para la generación de renta o mantenimiento de la fuente.
«Todavía hay mucho pasos que hacer y estamos conformando la unidad […] Nosotros vamos a ir siguiendo el dinero a través del sistema financiero y verificando los ventores de error y verificando que las operaciones sean las necesarias para la actividad comercial, industrial o las prestaciones de servicio que tengan», explicó Zelaya.
Hasta el momento, el país no cuenta con acuerdos de intercambio de información para fines fiscales o tributarios con otros países, ya que hasta este día se lanzó la UREF y todavía hay que hacer «un barrido con los que se tiene operaciones».
El ministro aseguró que se irá trabajando para ver cuántas operaciones tienen las empresas en estos países y que irán trabajando poco a poco.
La estructura de la UREF se dividirá en dos fases, cada una de ellas compuesta por 20 auditores con una basta experiencia en la detección de posibles casos de evasión fiscal. En un inicio esta unidad se implantará con 20 auditores y luego abrirá un concurso público para que expertos en la materia del sector privado puedan ser parte del trabajo de la unidad.