El gobierno de Honduras reclamó por la vía diplomática al gobierno salvadoreño, luego que el presidente de la república Nayib Bukele declaró que la elección del mandatario Juan Orlando Hernández fue fraudulenta.
El domingo 21 de marzo pasado, el presidente Bukele, dijo en cadena nacional de radio y televisión, que el gane de Nuevas Ideas en las urnas el 28 de febrero pasado fue democrático, no como en Honduras que fue «a la fuerza, o impidiendo la participación de la oposición».
«Nadie discute que en su primera elección [Juan Orlando Hernández] ganó democráticamente, pero luego usó su poder para cambiar el resultado de una elección, donde iba perdiendo, hubo un apagón y milagrosamente terminó ganando», agregó el presidente salvadoreño en la cadena de radio y televisión.
El gobierno hondureño expresó, a través de una nota verbal enviada a la cancillería salvadoreña, con fecha 23 de marzo de 2021, que «rechaza enfáticamente las expresiones lesivas», del gobierno salvadoreño en contra del gobierno hondureño, el cual es dirigido por Hernández.
El hermano del presidente hondureño, Antonio «Tony» Hernández, fue condenado ayer a cadena perpetua por un juez de Nueva York, por los delitos de tráfico de drogas a Estados Unidos. Luego de la condena penal en contra del hermano del presidente de Honduras, el mandatario salvadoreño publicó en Twitter: «¿Y los que hicieron escándalo y me llamaron de irresponsable para arriba, por no haber invitado al Presidente de Honduras a la toma de posesión?».
Además de la condena del hermano del mandatario hondureño, en el último trimestre de 2019, miles de hondureños salieron a las calles a protestar en contra del régimen de Juan Orlando Hernández, al cual calificaban de «narco gobierno», según reportes periodísticos.
Algunas de las protestas fueron reprimidas por el mandatario hondureño con el uso de las fuerzas armadas. A pesar de las exigencias, de los ciudadanos, el mandatario hondureño aún continúa en el poder.