La selección nacional de Honduras llegó a eso de las 5:30 p.m. al estadio Olímpico Metropolitano, de San Pedro Sula. La bicolor volvió a ese escenario casi 24 horas después de caer 2-0 contra Canadá, por la novena fecha del octogonal de Concacaf.
Al combinado catracho, en esta eliminatoria mundialista, solo le queda terminar con honor. No tiene nada más que hacer. Puede empezar a lavar esas heridas el próximo domingo, contra la selección de El Salvador.
Con 17 goles en contra, cinco a favor y tres puntos que sirven nada más para ser la peor selección del área, la selección hondureña sólo aspira a no terminar última de la clasificación. Ante eso, el primer escalón a subir es la Selecta, que solo lo aventaja por tres unidades y, también, con casi nulas opciones de ir al Mundial Catarí.
Contra la Azul es la inmejorable opción de sumar, porque el lunes a primera hora, Honduras debe viajar a Estados Unidos para medirse a la selección de las barras y las estrellas, que ya ha demostrado con otros grandes del área que es difícil sacarle puntos en su suelo.
Además, apegado a las estadísticas, la H nunca ha perdido contra El Salvador en Honduras, motivación que también se traslada a la Selecta, que ya no tiene nada más que perder en el octogonal y puede romper ese maleficio.