Las transfusiones de plasma como terapia de soporte para pacientes moderados y graves, ha sido una de las estrategias que ha permitido la restauración de la salud de centenares de salvadoreños.
Como parte del compromiso con la salud de los pacientes, el Hospital El Salvador (HES) aplica pruebas de biología molecular conocidas como NAT a los potenciales donadores de plasma, las cuales permiten detectar oportunamente material genético de agentes patógenos infecciosos.
«Las pruebas NAT se le hacen al donante para saber si tiene VIH, sífilis, hepatitis o ciertas enfermedades que no le permiten ser donantes. Pero ¿cuál es la diferencia entre las pruebas Elisa que se realizaban antes y las NAT? Con una prueba Elisa, si el paciente está infectado, [el resultado] no sale en los exámenes en 15 días, [por tanto] el Elisa nos saldrá negativo. En cambio, las NAT nos reducen ese periodo a menos de cinco días, por lo tanto, hace que la donación sea segura», detalló la directora del HES, Laura Miranda.
De igual manera, el jefe del banco de plasma ubicado en el Hospital Nacional de Niños Benjamín Bloom, Jaime Alfaro, explicó que en este lugar se realiza otro de los procedimientos de última generación para garantizar transfusiones seguras del fluido.
«El otro proceso moderno es la inactivación de patógenos, el cual, en caso de que hubiese un periodo de ventana [tiempo desde que el patógeno entra al cuerpo y este produce anticuerpos] se lo somete a un proceso de inactivación lo que aumenta la brecha de seguridad de la transfusión», indicó Alfaro, con los que se garantiza la seguridad de las transfusiones.
Sobre la aplicación de plasma a pacientes con COVID-19 ha habido cuestionamientos a nivel de la comunidad médica en el mundo, no obstante, estudios ejecutados han demostrado la seguridad de la transfusión del fluido y los resultados favorables que este brinda cuando es indicado y aplicado a tiempo.
«Es algo a nivel internacional que se ha llegado a hacer recomendaciones del uso del plasma, y ya está bien definido, hay algunos que dicen que no funciona, pero la mayoría de los estudios sí han demostrado que funciona cuando se utiliza al inicio de la enfermedad y que se pongan dos dosis», indicó el jefe del banco de plasma del Hospital El Salvador, Rafael Trejo.
Por su parte, Alfaro reiteró que la aplicación del fluido es útil para pacientes moderados y graves, a quienes les permite disminuir la carga viral de la COVID-19 que les afecta, mas no es «un agua milagrosa» que va a reparar un pulmón, por lo que es importante usarlo oportunamente.
«Ese plasma tiene que ser utilizado en pacientes moderados y graves, y la indicación del médico tiene que ser a tiempo. Es una alternativa demasiado eficaz para pacientes moderados y graves. Es una alternativa bastante viable, que el único tropiezo es no tener donantes, y que los médicos no hagan la evaluación oportuna», enfatizó.
Si usted desea contribuir a la recuperación de más salvadoreños que padecen la COVID-19, puede llamar al banco de plasma del Hospital El Salvador al 2594-2171 para agendar su cita y someterse al proceso de selección de donantes de plasma.