La Iglesia católica de El Salvador anunció el miércoles que abrirá sus archivos a un juez que busca información relacionada a la masacre de El Mozote en la que fueron ejecutadas casi mil personas durante la guerra civil (1980-1992).
El juez de la ciudad de San Francisco Gotera, Jorge Guzmán, ha solicitado a la iglesia acceso a su archivo para «hacer una inspección y darse cuenta de lo que hay referente a la masacre de El Mozote», aseguró el arzobispo de San Salvador, José Luis Escobar.
En un mensaje que transmitió por medio del canal de televisión de la arquidiócesis, Escobar aseguró que conversó con el juez Guzmán sobre sus requerimientos para la investigación.
«Su intención es recabar aquella información útil y necesaria para apoyar a las víctimas de la masacre de El Mozote y que en ningún momento pretende llevarse ningún documento (en original)» del archivo, agregó el arzobispo.
El juez ha anunciado que efectuará una inspección el 25 de enero al archivo de Tutela de Derechos Humanos del Arzobispado de San Salvador, en busca de documentos que le puedan ser útiles, explicó Escobar.
«Lo esperamos para hacer la inspección que quiere hacer y vamos a apoyarle con la copia de los documentos que requiera, con muchísimo gusto», insistió el sacerdote.
Entre el 10 y el 13 de diciembre de 1981, soldados del ahora proscrito Batallón Atlacatl del Ejército ejecutaron, según cifras oficiales, a 986 personas, entre ellas 558 niños, en El Mozote, noreste de El Salvador, y comunidades adyacentes.
Desde mediados de 2020 Guzmán, a cargo del caso, intentó infructuosamente acceder a los archivos en seis cuarteles militares para buscar información sobre el hecho.
El 27 de octubre del año pasado, el ejército entregó información seleccionada de la masacre al juez, pero según los abogados defensores de los deudos es «intrascendente».
La Iglesia documentó unos 50.000 casos de violaciones a los derechos humanos ocurridos durante la guerra civil, los cuales sirvieron de base para un informe que presentó la Comisión de la Verdad, creada por Naciones Unidas para investigar las atrocidades cometidas.