Para este año, la Semana Mayor contará con las restricciones para evitar contagios de la COVID-19. Y aunque las medidas dependerán de cada una de las parroquias, el arzobispo de San Salvador, José Luis Escobar Alas, anunció el pasado que la única procesión que se suspendería sería la de Domingo de Ramos.
Por otra parte, explicó que las otras procesiones sí se van a realizar, no obstante, se realizarán bajo lineamientos sanitarios más estrictos que no permitan aglomeraciones durante los actos.
«El Jueves Santo haremos una procesión solemne, pero restringida porque vamos a tratar de evitarles que la gente se aglomere, y esperamos que nos sigan con la mente y el corazón, a través de la tecnología», dijo en su momento el prelado.
En ese sentido, muchas iglesias transmitirán a través de sus redes sociales los actos religiosos durante el triduo pascual, con el objetivo de que adultos mayores y personas con enfermedades crónicas pueda participar de manera virtual de ellos.