La inflación, con el 31 %, y la economía, con el 15 %, son las principales preocupaciones de los estadounidenses, a menos de una semana de que se lleven a cabo las elecciones de medio término en Estados Unidos, reveló la más reciente encuesta de Reuters/Ipsos.
Casi la mitad de los estadounidenses encuestados señaló que la inflación — que llegó al 8.2 % en septiembre — y la economía son los factores que más influirán en su voto el 8 de noviembre para elegir a los futuros gobernadores, senadores y congresistas, en un momento en el que los estudios también indican que el Partido Republicano está ganando terreno frente al Partido Demócrata.
El 40 % de los republicanos son los más propensos a justificar su influencia de voto por estos dos factores, seguidos por el 28 % de los independientes y el 21 % de los demócratas.
Por otra parte, el 75 % de los encuestados dijo estar más preocupado por que los precios sigan subiendo que por la posibilidad de que ellos o su pareja pierdan su trabajo (11 %).
Asimismo, dos de cada cinco ciudadanos afirmaron que su situación financiera personal es más débil ahora que hace un año.
Un tercio de los estadounidenses afirmó que el aumento del precio de los bienes y servicios se debe a cuestiones económicas o de la cadena de suministro, y el 30 % indicó que el gasto del Gobierno federal es la causa principal del aumento.
«Los estadounidenses siguen sintiendo la presión económica», de acuerdo con la encuesta.
Otros temas que podrían influir a la hora de ejercer el sufragio son el derecho al aborto y el aumento de la financiación de la Policía para que luche contra la delincuencia.
Además, la población teme la posibilidad de violencia política durante y después de las elecciones.
El 42 % manifestó estar inquieto por amenazas de violencia política, mientras que al 64 % le preocupa que los extremistas cometan actos de violencia política después de los comicios si no están satisfechos con el resultado.
El estudio fue desarrollado entre el 18 y el 24 de octubre a 4,413 adultos mayores de 18 años de los estados de Alaska (tradicionalmente republicano) y Hawái (tradicionalmente demócrata).