El Observatorio Mype de la Fundación Salvadoreña de Desarrollo Integral (FUSAI) presentó este jueves la investigación denominada «El estado actual de la mype 2023: La otra cara de la economía», un informe que compila los resultados de más de 12,500 encuestas aplicadas y 16 estudios parciales en la zona rural y urbana, y a todos los giros económicos que componen este sector.
«De este primer informe surge una conclusión muy clara para nosotros, las mypes son un sector heterogéneo, segmentado y complejo […] No podemos entender a El Salvador sin entender a las mypes que son el corazón de la salvadoreñidad y del tejido empresarial», destacó el presidente de FUSAI, Luis Castillo.
El economista explicó que la investigación presentada es uno de los esfuerzos más importantes por recopilar datos sobre este rubro, cuyo último precedente fue «El libro blanco de mype» de 1996.
Entrando en materia, el investigador, William Pleites, explicó que el Observatorio Mype, con datos hasta 2022, identifican un total de 833,164 unidades económicas de este sector en el país, de las cuales 94.4 % son microempresas y 5.3 % pequeñas empresas, y estas brindan empleo a siete de cada 10 salvadoreños.
Mientras tanto, otro de los encargados de la investigación, Francisco Góchez, comentó que los hallazgos en materia de índice de confianza son contundentes y demuestran una actitud positiva del sector acuñada también otro de los elementos en otra de sus características fundamentales, la resiliencia.
Entre los indicadores de confianza destaca una vista positiva del empresario de la mype hacia las condiciones de sus negocios, ya que, nueve de cada 10 aseguró que su situación ha sido mejor o igual en la actualidad; otro elemento a destacar son las condiciones de seguridad donde solo dos de cada 100 entrevistados consideran que este parámetro les genera afectación a su actividad productiva. Estos datos corresponden al cierre del segundo trimestre de 2023.
«En el segundo trimestre del año anterior estábamos hablando de qué 27 de cada 100 nos manifestaban en ese momento que estaban teniendo problemas por la delincuencia, de 27 hemos pasado a dos, eso dinamiza a la microempresa», matizó Góchez.
El también investigador Gabriel Pleites abordó los retos de la mype para consolidar su desarrollo como sostén de la economía, y consecuente para que permitan mejorar las condiciones de vida de empresarios y empleados relacionados.
Subrayó la importancia en la adopción de herramientas y equipos tecnológicos, que si bien es cierto han incrementado, aún es necesaria una mayor penetración, también señaló un bajo uso de cuentas de ahorro y diversas alternativas financieras, entre otras.
Además resaltó, entre otros elementos, que el 60 % de la mype es liderado por mujeres, demostrando su potencial para romper la brecha de género en materia económica; a su vez, explicó que los datos recopilados desvelan que este sector ha fungido como desincentivador de la migración ilegal.
La investigación «El estado actual de la mype 2023: La otra cara de la economía» es un libro de 150 páginas, de las cuales alrededor del 80 % son datos estadísticos, ya que los responsables dijeron que pretenden que se vuelva una herramienta de consulta con un mínimo de interpretación con miras a que sea útil para el Gobierno, la academia y los cooperantes.