Bryan Paz no dormirá en paz. El ariete del 11 Deportivo tuvo la clasificación a cuartos de final de los ahuachapanecos en sus botines, pero falló un penalti y luego los quemó Jocoro con un misil de Kevin Calderón que valió para la victoria de 0-1.
Los tanques fronterizos y los fogoneros entraron al césped del Arturo Simeón Magaña con la mirada sobre el balón, pero los oídos en Usulután: una derrota de Firpo ante Santa Tecla los metía a ambos sin importar cual fuese el resultado de su duelo.
Empero, también sabían que la llave de acceso también estaba en sus manos, y el más convencido en el tramo inicial fue Jocoro. El cuadro morazánico buscó con incistencia de la portería de los anfitriones y con un poquito más de puntería y fortuna hubiesen tenido el marcador 0-2 antes del primer cuarto de hora.
Santos Guzmán desperdició lo que parecía un gol cantado en los primeros hervores del juego, y luego Kevin Calderón sacó un remate que besó el travesaño y que sacó el susto a la hinchada de los aurinegros congregados en el estadio de la ciudad de los ausoles.
Luego de esos sustos el 11 Deportivo administró la pelota e intentó llevar la iniciativa en ofensiva, pero abusó de los centros que en su mayoría terminan rechazados por la espigada zaga que manejan los orientales. Al final del primer acto la única celebración de los locales fue la expulsión de Walter Canales por una manotazo sobre Kamoy Simpson y que en Usulután cerraban también 0-0.
En el complemento, con una pieza menos, el los pupilos Edgar Henríquez se atrincheraron en su parcela a defender el cero y quemar a como fuera posible el tiempo para jugar con la desesperación de los ahuachapanecos que se enteraron temprano que Firpo no solo había abierto el marcador sino que lo incrementó a 2-0 con media hora por jugarse.
A partir de ahí los tanques fronterizos pisaron el acelerador a fondo y tuvieron la clasificación en sus pies, pero la desperciaron en los botines de Bryan Paz, que perdió la compostura y terminó volando la pelota desde el manchón del penalti en el 79′.
El pecado lo pagó caro el 11 Deportivo porque con un misil de larga distancia Kevin Calderón decretó el 0-1 en el 83′ y ese tanto sepultó las ilusiones locales que acabaron silbados.