El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, dijo estar devastado tras el ataque cerca del Capitolio que dejó un agente muerto y otro herido este viernes.El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, dijo estar devastado tras el ataque cerca del Capitolio que dejó un agente muerto y otro herido este viernes.
«Jill (su esposa) y yo tenemos el corazón roto tras enterarnos del violento ataque contra un control de seguridad del Capitolio de Estados Unidos», dijo el mandatario en un comunicado en el que indicó que ordenó colocar la bandera de la Casa Blanca a media asta.
Un policía murió y otro resultó herido este viernes después de que una persona los atropellara delante del Capitolio de Estados Unidos, antes de salir del coche cuchillo en mano y ser abatido, tres meses después de la toma perpetrada por seguidores del exmandatario Donald Trump.
Por el momento las autoridades no consideran lo ocurrido como un acto relacionado con el «terrorismo» e indicaron que no existe una «amenaza en curso».
El incidente se produjo a las 13H02 (17H02 GMT) cuando el sospechoso atropelló a los dos agentes que custodiaban la barrera norte del Capitolio, indicó la jefa de la policía del Congreso, Yogananda Pittman.
El sospechoso salió del vehículo con un cuchillo en la mano y no respondió a las advertencias verbales que le hicieron los agentes presentes en el lugar, tras lo cual los policías le dispararon.
«Uno de nuestros agentes sucumbió a sus heridas», dijo Pittman en una conferencia de prensa.
Poco después el cuerpo policial identificó al agente fallecido como William F. Evans e indicó que llevaba 18 años de servicio.
Las autoridades informaron que el sospechoso murió poco después de las 13h30 (17H30 GMT), pero todavía no han publicado ningún detalle sobre su identidad.