Kevin Santamaría ha vivido las buenas y no tan buenas en el fútbol. Hace dos años, el volante que ahora juega para Águila tuvo el sinsabor de un descenso en Perú, con el plantel de Llacuabamba.
El cuscatleco se había ido a ese país suramericano y ahí lo tomó a contramano la emergencia sanitaria mundial por Covid 19. Pero luego, el fútbol regresó en Perú, pero el salvadoreño, que marcó varios goles, no pudo evitar que los mineros se fueran a segunda categoría.
Pero dos años más tarde, la sonrisa se marcaría de nuevo en el rostro de Santamaría con el boleto a la final con Águila, equipo al que llegó en enero de este año. Aportó un poco más de media docena de goles para el acceso de los migueleños al partido que vale por el título en el Clausura 2022.
«Son cosas del fútbol. Lo importante es disfrutar y levantarse. Cuando ganas cosas, hay que saber manejarlo, hay que alegrarse. Cuando perdés, hay que levantarse. Solo el mediocre no se levanta. Con mi familia, hemos tratado de salir adelante. Ahora voy a pelear una final que será importante para nosotros », dijo el mediocampista del plantel migueleño, en plática con «Diario El Salvador»
Santamaría, cuatro años después, volverá a jugar una final en El Salvador. La última fue en el Apertura 2018, la que ganó ante Alianza por 2-1.
«Gracias a Dios, esa la gané con Santa Tecla. En Perú también estuve en una final (de segunda división) pero no se me pudo dar. Así son las etapas. Ahora hay que seguir y creer en nosotros», señaló el volante de los naranja y negro.