La selección femenina mayor de El Salvador sigue con su paso arrollador en la eliminatoria a la primera edición de la Copa Oro en esta rama, que se jugará el próximo año, entre febrero y marzo, en Estados Unidos.
La Azul, que es dirigida por Éric Acuña, fue hasta la isla de las Antillas Menores para sumar otros tres puntos frente a Martinica, rival al que ya había enfrentado una vez en el estadio Las Delicias, y goleó con pizarra de 9-1.
El de esta noche, en el estadio municipal Pierre-Aliker, en la capital Fort de France, no fue el mismo rival al que desnudó en El Salvador. El equipo caribeño plantó cara, dejó menos espacios al equipo cuscatleco, aunque no tuvo profundidad para poner en aprietos a la portera Idalia Serrano.
El combinado nacional, que ya tiene un molde definido de estilo de juego, siempre tuvo el arco contrario en mente, pero encontró resistencia y Brenda Cerén junto a Samaria Gómez, las dos jugadoras en punta, no hallaron la fórmula para abrir el arco de las antillanas.
Pasó más de una hora para poder mover los cartones en el duelo. Y el primer tanto de la noche llegó bajo la firma de Victoria Sánchez, del Texas State Bobcats, quien perforó la portería de Martinica en el minuto 63.
Ese gol llevó alguna tranquilidad al equipo salvadoreño, que con antelación ya había reservado su clasificación a la ronda preliminar, en la que peleará el boleto a la Copa Oro contra un rival que se definirá el próximo 11 de diciembre mediante un sorteo.
El Salvador, tras ese gol, no renunció al ataque, siguió inquietando a las antillanas en busca de sellar el triunfo y armar maletas para volver a casa porque el próximo domingo cierra esta fase con duelo contra Nicaragua, en el estadio Mágico González.
Esa diana de la tranquilidad llegó por la vía del penalti. Brenda Cerén fue derribada en el área y la árbitra no dudó en señalar el cobro de los 11 pasos.
Cerén hizo justicia y colocó el 2-0 para seguir perfectas, con cinco salidas a la cancha que se cuentan por victorias.