El manual de entrada al estadio Cuscatlán exigía como requisitos indispensables, mascarilla, alcohol gel, toma de temperatura y por supuesto la cartilla de vacunación con doble dosis, pero Ernesto Muñoz, de Iopango, fue mucho más allá: compró y lució un traje de bioseguridad durante el duelo entre El Salvador y México.
La acción ilopaneco, dueño de una pequeña pupusería, robó miradas, reflectores, pero sobre todo dio un claro ejemplo que entre la hinchada también hay conciencia lo que está en juego al no cumplir las medidas de bioseguridad y anoche se cumplieron al pie de la letra desde que se pisaban las entradas a las localidades del Coloso de Monserrat.
«Este traje lo compré el lunes y me acordé, que cuando se le ganó a México la otra vez habían hecho trajes así por lo de gripe porcina. De ahí se me ocurrió la idea porque [con la COVID-19] es de venir a apoyar, pero la bioseguridad sobre todo», dijo Muñoz, acuerpado por un grupo de amigos que, aunque no llegaron igual de protegidos si cumplieron con las normas de exigencia.
Y es que no había forma que la COVID-19 se infiltrara con facilidad a las gradas o butacas del Cuscatlán. Cada hincha que ingresó al recinto tuvo que pasar no menos de cuatro filtros.
Primero tenía que pasar el registro policial para evitar que ingresara objetos prohibidos, luego personal de salud exigía DUI y cartilla de vacuna, pasaba posterior a desinfección con alcohol gel, toma de temperatura. Y solo superando esos pasos el aficionado podía finalmente presentar su boleto de entrada y disfrutar del partido.
«Hasta el momento he visto que todos los aficionados andamos con mascarillas, las cartillas en reglas y me parece muy bien», celebró Ernesto Muñoz.
Lo cierto es que durante los recorridos realizados por periodistas de este medio en las horas previas al juego, las autoridades no reportaban ningún tipo de anomalías ni de seguridad ni bioseguridad.
Eso sí, los llamados a cumplir las normas de salud nunca faltaron. «Vamos a ganar, pero el partido más importante es que venzamos el COVID. Se los suplico venzamos el COVID y disfrutemos el partido», pidió la comisionada presidencial Carolina Recinos en una pequeña charla con aficionados en el Cuscatlán.
La funcionara llegó de improvisto al estadio para supervisar el trabajo articulado de Gobierno para derrotar a la COVID-19 que es un adversario mucho más fuerte que México.