En Chalchuapa, desde muy temprano, cientos de personas asistieron a la tradicional lavada de ropa de Jesús, que se desarrolló este Lunes Santo en el municipio de Chalchuapa, Santa Ana.
La tradición inició con una procesión que parte de la Cofradía de la Hermandad de Jesús Nazareno, ubicada a un costado de la iglesia Santiago Apóstol y cada miembro con mucha devoción lleva las túnicas al balneario El Trapiche.
Para los feligreses católicos, esta tradición representa un acto de fe nato de la ciudad precolombina, debido a que, según sus creencias, purifica el alma y corazón de las personas durante la Semana Santa y el resto del año.
En total son 40 piezas de ropa las que lavaron y que, según la hermandad de Jesús de Nazareno que es la encargada de organizar la tradición, utiliza la imagen de Jesús durante todo el año. Esta es lavada por 12 mujeres, en alusión a los 12 apóstoles que tenían la misión de predicar la vida, muerte y resurrección, explicaron miembros de la feligresía.
«Esta celebración para nosotros significa la simbolización de cómo lavamos la ropa sucia, también debemos limpiar nuestro corazón de todo pecado por medio de la confesión, para poder vivir esta semana santa con mucha fe y devoción», expresó Elizabeth Salas, una de las doce mujeres que participó en la lavada.
Al finalizar el día, con estas prendas parten hacia la parroquia Santiago Apóstol en una manifestación religiosa, conocida como la Procesión de Las Animas, donde hay un reencuentro con Jesús con la ropa ya lavada y seca.
Esta tradición es una de las más longevas del país, tiene más de 100 años y este año, gracias a las estrategias de seguridad implementadas por el Gobierno, se evidenció más afluencia de la comunidad católica.
«Como chalchuapanecos no podemos perdernos esta tradición, yo cada vez que vengo recuerdo a mi papá, él siempre nos inculcó que nunca hay que dejar perder lo nuestro. Gracias a Dios ahora ya se puede venir más tranquilo, aparte de lo religioso, uno se puede quedar, disfrutar de las aguas y comer algo en familia», indicó Hernán Rodríguez, quien visitó el lugar junto a sus hijos.