La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha publicado una guía con nuevas recomendaciones sobre el uso de la mascarilla para protegerse de la COVID-19. La institución advierte que, en la casa, es recomendable utilizar la mascarilla cuando llega un visitante que no es miembro del hogar y la ventilación del lugar sea deficiente. También debe usarse si no se puede mantener la distancia física de al menos un metro.
Asimismo, advierte que las personas no deben usar mascarilla durante una actividad física, ya que esta puede reducir la capacidad de respirar adecuadamente. Lo recomendable es mantener la distancia física de, al menos, un metro.
En cuanto a los niños menores de cinco años, recomiendan que no deben usar mascarilla, y los infantes de seis a 11 años pueden usarla según factores de riesgo como la intensidad de transmisión en la comunidad y la disponibilidad de supervisión adulta.
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Ante esto, los profesionales de la salud advierten que actualmente los niños menores de cinco años no deben ser llevados a lugares públicos o estar en contacto con el virus en lugares como hospitales.
«Como están pequeños, les aumenta el riesgo de asfixia; al filtrar la inhalación y exhalación de partículas, también se disminuye la inhalación de oxígeno y la exhalación de dióxido de carbono, y no se tiene estudios del problema que eso puede generar a largo plazo, ni siquiera en adultos, mucho menos en niños», explicó el médico Francisco Hernández, y agregó: «El uso correcto de la mascarilla necesita un nivel de compresión de cómo y por qué se usa, algo que los niños pequeños difícilmente van a comprender y, lejos de protegerlos, puede terminar siendo una fuente de contaminación o de contagio para ellos mismos», explicó Hernández.
De la misma forma, la OMS indicó que las caretas brindan protección ocular pero no sustituyen la protección de las mascarillas. La institución no aconseja el uso de las válvulas de exhalación porque descarta la función de filtración de la máscara de tela.
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Ante esto, Hernández mencionó que el objetivo del uso de la mascarilla es evitar contagiarse y evitar contagiar a otros; por lo tanto, se necesitan mascarillas que filtren el aire que se inhala y el que se exhala.
«Las mascarillas con válvula de exhalación fueron hechas con el objetivo de filtrar las partículas del ambiente cuando se inhala, y en ese momento la válvula se cierra; y al expulsar el aire, al exhalar, se abre, sacando al ambiente posibles virus. Ahí se pierde el objetivo de usar la mascarilla para proteger a los demás», enfatizó el especialista.