De acuerdo con un estudio publicado por el repositorio de ciencias de la salud, medRxiv, la aplicación de la dosis de refuerzo o tercera vacuna de la COVID-19 genera altas concentraciones de anticuerpos, que pueden superar los anticuerpos generados por la infección natural, las dos primeras dosis, o la combinación de ambas.
El estudio llamado «prueba para determinar los anticuerpos antes y después de la aplicación de la vacuna SARS-CoV-2 mRNA en agentes o personas en condición estable de salud» fue publicado el 21 de noviembre del presente año, y muestra que las concentraciones de anticuerpos (IgG) se dispararon 25 veces después de la dosis de refuerzo.
«Documentamos grandes respuestas de anticuerpos 6-10 días después de la dosis de refuerzo, con niveles de anticuerpos que superan los niveles documentados después de la infección natural con COVID-19, después de dos dosis de vacuna o después de la infección natural y la vacunación», señala el estudio.
El estudio se desarrolló en Estados Unidos con una muestra de 33 hombres y 16 mujeres que estaban completamente vacunados. Los resultados indican que los refuerzos generan grandes respuestas de anticuerpos en adultos sanos, con niveles de anticuerpos posteriores al refuerzo que superan los niveles documentados después de la infección natural con COVID-19.
«Estos datos respaldan el uso de refuerzos para prevenir infecciones irruptivas y sugieren que la inmunidad mediada por anticuerpos puede durar más que después de la segunda dosis de vacuna».
Por lo tanto, esta evidencia científica se suma a diversos estudios que han señalado la importancia de la dosis de refuerzo para aumentar los anticuerpos, especialmente en el contexto actual de aparición de nuevas variantes de la COVID-19, como la delta y la recién identificada Omicron.
En El Salvador, está habilitada la tercera dosis de la vacuna para todos los mayores de 18 años. Este beneficio se implementó de manera progresiva, priorizando a los adultos mayores, personas con enfermedades crónicas y personal de primera línea como los doctores y cuerpos de socorro.
Por lo tanto, es uno de los pocos países que tiene suficiente disponibilidad de vacunas anti-COVID-19 para aplicar una tercera dosis. Solo el 28 de noviembre se aplicaron 10,714 dosis de refuerzo a salvadoreños, y 35 a extranjeros. En total, se han administrado 674,929 terceras dosis a escala nacional.