Delta, la variante más contagiosa del COVID-19, según expertos, ha encendido las alarmas de autoridades de salud por su rápida propagación en el mundo en general -y en América Latina, en particular- sin embargo, muchos coinciden en que no son las nuevas variantes la principal fuente de inquietud en este momento.
«La principal variante de preocupación es la variante inequidad», afirmó Xavier Sáez-Llorens, jefe del Departamento de Infectología y director de Investigación Clínica del Hospital del Niño José Renán Esquivel, de Panamá.
Sáez-Llorens, que participó en un conversatorio internacional de la organización Voz de la Diáspora sobre el tema, junto a otros expertos, ve con desasosiego que aún haya países donde ni siquiera se alcanza el 2% de vacunación.
En toda Latinoamérica, afirma, apenas se está al 20%, mientras que, en ciertos países europeos, Estados Unidos y Canadá ya se vislumbra un avance del 50% o 60% ellos solos. «Entonces lógicamente la inequidad es tremenda», afirmó.
Para el experto, lo anterior representa una seria amenaza de seguir con alzas en los picos de contagios por cuenta de la variante delta, más muertes y por supuesto cifras alarmantes de ocupación hospitalaria, porque «en la medida que un país vacune y el país vecino no vacune, lógicamente puede haber un bumerán de casos, ningún país en el mundo está seguro, si el país vecino no está seguro», señaló.
Los especialistas coinciden que el hecho de que las vacunas lleguen a todos, sin excepción, debe ser de interés mundial porque en los países donde hay más contagios es donde surgen las nuevas mutaciones como la delta, que fue reportada en la India por primera vez a finales del año pasado y resultó ser dos veces más contagiosa que la variante original del virus.
Según la Organización Panamericana de la Salud (OPS), los países que más casos de la variante delta han presentado en la región son Costa Rica, Brasil, Ecuador, Chile y México; en este último el 94% de los contagios corresponde a ésta.
El experto también explicó que la variante predominante en las muestras enviadas por autoridades salvadoreñas es la A2.5 con un 22 % y otras variantes que según él «no son ni de interés ni de preocupación».
Sin embargo, sin importar la variante, en algo en lo que coincide la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) con los expertos es en el hecho que las enormes divisiones económicas de América Latina también deben tenerse en cuenta para poder avanzar en la lucha contra el virus.
«Esta es la región más golpeada por COVID en el mundo. Y es una región con mucha desigualdad», dijo Guillermo Anllo, jefe regional para América Latina y el Caribe del Programa de Política Científica, Tecnológica e Innovación de la UNESCO, a la agencia de noticias Reuters.
Según las proyecciones de la UNESCO, solo un tercio de la población de América Latina y el Caribe habrá sido inmunizada para fin de año.