CARACAS – Leopoldo López, dirigente opositor venezolano, indicó este martes que tras su salida del país trabajará junto al gobierno interino con una agenda enfocada, entre otros aspectos, en la celebración de elecciones presidenciales y en llevar a la justicia internacional a los responsables de violaciones de derechos humanos.
«Yo salgo para trabajar. Yo salgo para enfrentar a la dictadura. Yo salgo para llevar la voz de quienes hoy no pueden llevarla porque están en Venezuela»
indicó López en una rueda de prensa en Madrid, luego de su salida de la embajada española en Caracas y su huida del país este pasado fin de semana.
Comisionado para el centro de gobierno de la presidencia encargada de Venezuela, López indicó que su labor estará centrada en tres grandes objetivos.
La primera es promover que en Venezuela «se pueda materializar una elección presidencial libre, justa y verificable». Lo segundo, dijo, es «hacer lo que corresponda» para que los responsables de violaciones de los derechos humanos «puedan ser sometidos a la justicia internacional». Y por último, buscar los mecanismos para «poder aliviar el sufrimiento» del pueblo venezolano.
López fue detenido en febrero de 2014 y sentenciado a casi 14 años de cárcel tras ser acusado por el gobierno de incitar a la violencia en manifestaciones masivas.
En el 2017 fue puesto en arresto domiciliario, hasta abril de 2019, cuando con ayuda de soldados y un exjefe del Sebin (el Servicio Bolivariano de Inteligencia), durante un fracasado intento de golpe militar, se refugió en la embajada de España en la capital venezolana.
El dirigente opositor señaló en Madrid que, además de las tres premisas mencionadas, buscará la unidad no solo política, sino también de la sociedad civil y de la comunidad internacional.
«Vamos a dar nuestro mayor aporte para poder unificar, cohesionar y fortalecer la coalición internacional alrededor de la búsqueda de la libertad y la democracia para Venezuela».
Igualmente, destacó que no trabaja solo. «Yo soy parte de un equipo que lidera nuestro presidente Juan Guaidó, en donde somos varios quienes tienen distintas responsabilidades», apuntó.
No descartó, en la medida que la pandemia lo permita, realizar una gira por Europa y América, para llevar la causa de la oposición venezolana.
Además de asegurar que no quería salir del país, López dijo que los venezolanos en el exilio quieren regresar a su tierra. «Vamos a regresar a Venezuela», afirmó.
Su escape y su llegada a España
Por motivos de seguridad y por no poner en peligro a quienes le ayudaron, el dirigente opositor no quiso dar muchos detalles sobre cómo logró su salida del país, ni sobre su llegada a España. «Lamentablemente las circunstancias me llevaron a tener salir de Venezuela», afirmó
Expuso que llegó al país europeo en un vuelo comercial y que fue él quien quiso tener una llegada discreta para poder darle la sorpresa a su esposa, Lilian Tintori, y a sus tres hijos.
Más allá de comentar que un grupo muy pequeño conocía su plan, indicó que en su recorrido para salir se encontró «con un país muy distinto al que dejé hace siete años». «Hoy Venezuela está destruida», sentenció.
Descartó que funcionarios del gobierno en disputa hayan negociado su salida. «¿Ustedes creen que Maduro iba a negociar mi salida? Para nada», apuntó.
Sobre su estatus en España, indicó que de momento desconoce cuál será. A sus padres les fue otorgada la nacionalidad años atrás y su papá, Leopoldo López Gil, es actualmente eurodiputado.
Papel de la comunidad internacional
Antes de su encuentro con la prensa, López se reunió con el presidente del gobierno español, Pedro Sánchez.
«El PSOE desea una vía pacífica, porque el pueblo venezolano debe sufrir lo mínimo. Apostamos por una solución política», indicó el partido de Sánchez en su cuenta de Twitter al reseñar el encuentro.
El comisionado del gobierno interino calificó la reunión como «cordial» y «positiva», y aseguró que le quedó clara la visión del gobierno español sobre el caso venezolano.
«Veo en Pedro Sánchez mucha empatía con la causa por la libertad de Venezuela. Veo en él, en su gobierno, en su partido, la determinación de acompañar la lucha por la libertad y elecciones libres en Venezuela», apuntó.
Detalló que en la conversación planteó la necesidad de ampliar las sanciones europeas a funcionarios venezolanos. El planteamiento es utilizar la lista de las 56 personas identificadas en el último informe sobre derechos humanos de las Naciones Unidas.
Al ser cuestionado sobre el apoyo del gobierno de EE.UU., uno de los primeros países en reconocer la presidencia interina de Juan Guaidó, indicó que, si bien agradecen el «apoyo decidido» en los últimos años, la causa venezolana ha tenido el apoyo de ambos partidos.
«Esperamos, independientemente de lo que decida el pueblo de Estados Unidos, que continúe siendo un apoyo bipartidista», apuntó López, en referencia a las elecciones presidenciales del próximo 3 de noviembre.