El sábado habrá elecciones en la Fesfut. Con solo una terna propuesta, el congreso del balompié nacional solo tendría que hacer la distribución de cargos en el nuevo comité ejecutivo. Eso significa que solo la voluntad de la asamblea general del fútbol puede evitar que Hugo Carrillo siga al frente de la Fesfut. Pero Lisandro Pohl, extitular de Alianza cree que la mejor salida para que Carrillo no continúe al frente de la institución rectora del balompié nacional es una huelga general en el fútbol salvadoreño, que tenga la venia de jugadores y todos los dirigentes de los planteles.
¿Cómo ve el hecho de que para las elecciones del sábado en la Fesfut solo hay un terna, la que encabeza Hugo Carrillo?
La nominación de los candidatos lo han hecho de acuerdo a los estatutos de la Fesfut. Ahí no hay donde objetar. Lo que sí podemos objetar es la ambición de ciertos miembros del actual comité ejecutivo de quererse estar perpetuando en posiciones donde ellos tampoco tienen nada que demostrara como logros en sus gestiones. Yo siento que nunca antes habíamos tenido en la Fesfut a federativos con esa ambición de estar continuando en el poder y eso nos está haciendo un gran daño. Hay que decir que Hugo Carrillo no es un hombre de fútbol. Él llegó de rebote a Atlético Marte. La carrera de Carrillo con Marte es haber descendido dos veces. Si no ha sido capaz en su equipo, menos lo ha sido en la Fesfut. Es enfermizo que las estructuras de las Adfas [Asociaciones Departamentales de Fútbol Aficionado] se presten a eso.
¿Está corroído el ambiente en el sector aficionado?
Yo pienso que sí. El poder que ellos tienen en la asamblea del fútbol es fuerte por el número de votos, pero son los que menos aportan al fútbol, los que menos impacto tienen. Todos nos enteramos de cosas bajísimas que pasan ahí, entonces eso es lo único malo, Media vez no se unan las tres ligas, la primera, la segunda y la tercera, las Adfas van a tener secuestrado el fútbol como hasta ahora.
También se quieren reelegir en el comité ejecutivo Émerson Ávalos y Américo Rodríguez, quienes vienen del sector aficionado. ¿Como ve ese deseo de estos dos personajes?
Nefasto. Solo miremos lo que Ávalos ha hecho con el arbitraje. Hemos escuchado tanto sobre cómo él manipula a las Adfas, cómo se aprovecha del puesto de presidente de la Adfa de San Miguel para un montón de beneficios personales. Hace una semana estuve platicando con un exempleado de la Fesfut, que estuvo con Américo Rodríguez en el Mundial de Fútbol Playa de Rusia, el año pasado. Se iba a los supermercados a buscar facturas o recibos de comida para presentarlos acá como si fueran gastos personales. Lo hace con una gran naturalidad. Se aprovechan de eso para beneficiarse con los viáticos y dietas que cobran. Con gente así cómo va a mejorar el fútbol salvadoreño.
Lo único que puede evitar que Carrilo siga al frente de la Fesfut es la voluntad de la asamblea general, pero ahora tampoco se ve que eso vaya a pasar.
Es una cachetada que tus mismos jugadores te estén diciendo que debes irte. Nelson Bonilla decía que se debía hacer una huelga. Creo que si directivos y jugadores paran el fútbol es la única forma reglamentaria para poder hacer que salgan de la Fesfut, Carrillo, Ávalos y Rodríguez. Porque ellos, es por demás. Creo que ellos no tienen ningún grado de vergüenza. Cuando tienes gente sin un grado de autoestima, es mentira, no se van a ir. Pero para poder paralizar de manera general este fútbol, los jugadores deberían tener el apoyo total de los dirigentes de sus equipos. Así como está la situación es fácil, pero se necesita un líder que coordine eso. Ponerte a llorar no te convierte en líder. En un ambiente distinto se podría llegar a un entendimiento con el Indes, pero con Hugo Carrillo en la Fesfut difícilmente se pueda lograr. Yamil Bukele, presidente de Indes, sabe, conoce de deportes y entonces encontraría la forma de poder solucionar este impasse. De parte de la Fesfut debe haber esa empatía para generar los puentes, para lograr los acuerdos.
¿Por qué cree que Carrillo, Ávalos y Rodríguez quieren llegar a las Fesfut?
Siento que muchos han hallado una forma de vivir de ahí. Cuando cobrás 3 o 4 cuatro mil dólares mensuales, posiblemente, entre dietas y viáticos, no se quieren ir. Ellos ya encontraron y no lo quieren dejar ir. Luego, Hugo Carillo, ¿quién era? Nadie. Luego, los celos con Diego Henríquez, director deportivo, vienen por la capacidad de gestión de él con los patrocinadores, cosa que Hugo no tiene y ese es el gran malestar que existe. Cualquiera que quiera hacer bien las cosas en la Fesfut, choca con el ego de ellos. Eso es lo triste de esto. Para unos es el dinero y para otros es el ego.
¿A quién se refería usted cuando habló en su espacio radiofónico de personas que están cerca del comité ejecutivo que tienen más poder que los federativos?
Quien era secretaria de la Comisión de Arbitraje y que luego fue secretaria de la presidencia de la Fesfut ahora es asistente de Hugo Carrillo. Tiene más poder que el mismo secretario general de la Fesfut, Luis Pérez Guerrero. Eso es inaudito. Es más, por todo lo que uno sabe, ella manda más que los mismos federativos individualmente. Cómo se va a mejorar esto cuando a una secretaria, de ribete, ahora la nombran comisionada. Así no vas a componer jamás el fútbol de El Salvador.
¿Cómo vio desde afuera la elección de Hugo Carrillo y Leonel Hernández para integrar el próximo ejecutivo de la Fesfut en representación de la primera división?
Yo creo que fue un error de cálculo de Pedro Hernández en la primera división, porque él se maneja con otros parámetros, los de empresario y padre de familia. Hay ciertos parámetros que él no traspasará. Él mide a Carrillo en estos parámetros, pero a Carrillo no lo podemos medir en esos parámetros. Pedro, como presidente de la Liga, debió haber luchado por convencer a uno más de los directivos de la primera división para poder sacar a Hugo. Pero el hecho de que no hayan llegado los otros cinco que lo apoyan a él, prácticamente le dieron vía libre a Carrillo.