Más de 64,000 personas han sido beneficiadas en El Salvador con los centros urbanos de bienestar y oportunidades (CUBO) construidos en diversas zonas de El Salvador, los cuales forman parte de la fase II del Plan Control Territorial, orientada a generar oportunidades en zonas estigmatizadas y alejar a los jóvenes de la violencia.
Seguridad sostiene que, por medio de los CUBO, «se ha sensibilizado, capacitado e incluido en la participación en actividades de dinamización en espacios públicos a un total de 64,457 personas beneficiadas, de las cuales se contabilizan 37,274 hombres y 27,183 mujeres, donde se dio uso constructivo del tiempo libre con actividades atractivas que pueden desarrollar en las comunidades».
Las autoridades aseguran que con la creación de estos espacios se evita que los jóvenes sean seducidos por los grupos de pandillas, «pues cada infraestructura cuenta con áreas muy atractivas para que los jóvenes se entretengan».
Actualmente están en funcionamiento cinco CUBO: Ing. Roberto Orellana, en Sitio del Niño, San Juan Opico; Milagro de la Paz, en el depatamento de San Miguel; IVU y Zacamil, en San Salvador, y en la comunidad Enmanuel, en Santa Ana.
El Gobierno tiene programada la construcción de al menos 30 CUBO para este año de un total de 60 proyectados en diferentes zonas del país. Hasta ahora hay avances en la construcción de otros CUBO en la colonia San José 2, en Soyapango; Panchimalco; reparto Santa Lucía, en Mejicanos; colonia Valle Verde, en Apopa, San Salvador; San Luis Talpa, en La Paz; y cantón El Tamarindo, en Conchagua, La Unión.
Este proyecto, liderado por la Dirección de Reconstrucción del Tejido Social, está contemplado en la fase Oportunidades del Plan Control Territorial, que fue anunciada el 2 de julio de 2019. En esta etapa se ha mencionado que $91 millones son destinados para la construcción de los CUBO a escala nacional.
BENEFICIOS MÚLTIPLES
«Los CUBO son espacios que impulsan el desarrollo dentro de las comunidades, pues benefician a los niños y jóvenes que viven en los alrededores. Lo que queremos hacer es generar oportunidades a la juventud para que no bus – que caminos negativos», asegura Carlos.
Marroquín, director de Reconstrucción del Tejido Social. Los CUBO son equipados con biblioteca, sala de lectura, centro de cómputo, talleres, videojuegos y salón de usos múltiples con acceso a internet. Las autoridades han explicado que en los CUBO los niños y jóvenes son capacitados en cursos de diseño gráfico, inglés, italiano, voleibol, lectoescritura, computación, ajedrez básico, lenguaje de señas salvadoreñas (LESSA) básico I y II e introducción al náhuat.
Una de las principales metas es fomentar una cultura de paz trabajando de cerca con los jóvenes. «En cada uno se tienen espacios educativos que enseñan sobre salud y desarrollo de la niñez», dijo Marroquín.
