El Centro Ecoturístico Los Duendes del Gramalón es la apuesta de un lugareño de Berlín, en Usulután, para potenciar el turismo en el municipio y al mismo tiempo dar a conocer las historias de los antepasados lencas que se asentaron en la zona.
Rafael Cruz Luna reside en Berlín y hace 10 años al excavar en sus terrenos encontró vestigios de los antepasados lencas.
«Se inició porque descubrí que en este lugar había muchos vestigios de la cultura central lenca, me interesé y llegué a pensar que lo que encontramos lo podríamos dar a conocer a otros», mencionó Rafael.
Lo que comenzó como una pequeña cueva en la que halló diversos artefactos, se convirtió en un túnel subterráneo de 200 metros, en el que construyó también una pirámide.
«Al avanzar en la excavación de la cueva, encontramos piedras de moler, nahuales y piezas ceremoniales lencas, hachas de piedra, oxidiana, piezas de madera y papiros», cuenta Rafael.
Decidió llamarlo Los Duendes del Gramalón debido a las historias de las apariciones espirituales de los antepasados lencas en forma de duendes y también a que antes de que el municipio fuera nombrado Berlín, había tenido el nombre de Gramalón o Agua Caliente.
«Aquí siempre ha habido presencia de duendes. En honor a ellos tenemos el tronco de los duendes, en el que les dejamos comida y bebida que misteriosamente desaparece. Ellos la consumen», añadió.
Según el lugareño, siempre había visto que, a pesar del potencial del pueblo, Berlín no lograba posicionarse como destino turístico.
Por lo que con lo que había encontrado en sus terrenos, vio la oportunidad de crear algo llamativo para los turistas al ofrecerles historia sobre los antepasados de la zona oriental.
«Inicié esto porque quería colaborar para que nuestro municipio no fuera solo un puente para llegar a Alegría, sino que también convirtiéramos a Berlín en un verdadero destino turístico», contó, emocionado, Rafael.
El lugar también cuenta con un pequeño museo en el que la familia conserva diversos objetos antiguos para dar a conocer un poco de historia a quienes los visitan.
El centro ecoturístico, que aún no está abierto al público, está ubicado en la calle principal, que va de Mercedes Umaña hacia Berlín, a 2 kilómetros del centro de la ciudad.