Luego de la beatificación de los mártires Rutilio Grande, Nelson Lemus y Manuel Solórzano podrá iniciarse el proceso de canonización con la búsqueda de un milagro que sea concedido por cualquiera de los tres a través de la intercesión.
«Como la causa está amarrada, Nelson Lemus, Manuel Solórzano y Rutilio Grande, digamos que aquí hay un combo, y con uno que conceda el milagro pasan todos a ser santos», manifestó el padre Henríquez.
Explicó que, después de la beatificación, cuando la persona es incluida en el elenco de los beatos y Roma autoriza el culto y la intercesión, entonces se busca la concesión de un milagro que convierte al entonces beato en santo.
«A partir de la fecha cuando se lee el decreto, que es un acto jurídico que lo hacemos dentro de una misa, de que ¿Por qué es importante esto? Porque Roma está autorizando el culto a esta persona público, que se le puede rezar pedir intercesión, pedir milagro. A partir de entonces comienza la búsqueda de un milagro que cumpla con los requisitos de la misma congregación para los Santos para que esta persona pueda ser declarada santo, que sería la canonización», detalló.
A la vez, el padre Henríquez aclaró que, ningún milagro que pudiese ser concedido previo a la beatificación puede ser tomado en cuenta para la declaratoria de santo.
El padre Henríquez mencionó que aparte del culto y la devoción, el tercer punto es difusión de la oración, acto mediante el cual se busca el milagro que pueda cumplir con los requisitos para decretar la santidad de un beato.
«El tercer punto es difundir la oración. Por eso el sábado se va a hacer una distribución de estampitas en físico y a través de los medios digitales porque es invitar a la gente a que rece. Parte del trabajo de la comisión o de la Oficina de Canonizaciones es rezar para que se de un milagro para que cumpla con el canon y que pueda ser probado y pasen los tres a la santidad», señaló.
Por otra parte, dijo que, durante la ceremonia, el rito de beatificación se desarrollará en los primeros 30 minutos de la misa. Luego habrá las lecturas del Santo Evangelio y cantos.
«La ceremonia es una misa solemne y dentro de la misa está el rito de beatificación que está ubicado en los primeros minutos. El rito de beatificación son los primeros 30 minutos de esa misa, porque sucede entre «El Señor ten piedad» y «El Gloria», allí es donde está incrustado el rito de beatificación», subrayó.