La fiesta de Alianza y su fiel afición no terminó en el césped y los graderíos del Cuscatlán. La alegría que estalló en las venas de la hinchada blanca tras la ejecución del decisivo penalti de Narciso Orellana continúo en horas de la noche al pie del Divino Salvador del Mundo.
Ahí, espero religiosamente la hinchada blanca para convivir con sus héroes que se trasladaron en caravana para prolongar la fiesta con los suyos después de largo duelo que incluyó los 90 minutos reglamentarios, 30 minutos de tiempo extra y definición desde el manchón del penalti.
La llegada de los paquidermos al Salvador del Mundo se dio poco después de las 8:30 de la noche y por su puesto brotó el triunfalismo tanto de la afición como de los jugadores después de conquistar la corona 17.
«San Miguel muy bonito todo, pero gracias por participar», expresó Henry Romero, zaguero de los blancos, que vistió la camina naranja de los orientales.
Luego «el Catracho» se encargó de liderar el cantó «Alianza no tiene marido, Alianza no tiene mujer, pero tiene un hijo bobo que es de San Miguel».
También hubo cánticos dedicados a FAS, equipo al que ahora están a un título de igualarlo en la cima como máximo ganador del fútbol nacional.
Entre los jugadores más aclamados estuvieron Fito Zelaya, Mario González y Narciso Orellana, este último autor del penal con el que Alianza se consagró esta tarde en la final del Clausura 2022.
El corto pero cercano festejo entre jugadores y su afición, acabó con los tradicionales fuegos artificiales con el monumento a el Salvador del Mundo como testigo. Tras los festejos, Alianza se dirigió en la famosa conga bus a una celebración más íntima en un restaurante de la Zona Rosa, siempre en ciudad capital.
Fueron cientos de hinchas quienes se concentraron en el monumento capitalino y cantaron el popular himno: «Alianza yo te quiero, antes de ser rojo yo me muero», al sonido de los petardos y un juego de luces pirotécnicas que terminar de iluminar la noche blanca..