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La música de los tambores y las panderetas invade de alegría las instalaciones de la Escuela Parvularia de La Libertad. Los 356 niños utilizan estos instrumentos como parte de su proceso de formación, ya que aprenden sobre las notas musicales, pero también conocen nuevas formas de expresión.
Este proyecto musical fue establecido por iniciativa de las docentes de la parvularia, quienes buscaban implementar nuevas estrategias educativas lúdicas para que los niños tengan un aprendizaje integral y significativo. De acuerdo con la docente Arely Espinoza, este proyecto inició hace más de un año con instrumentos artesanales como guacales,latas y palos de escoba.
Unos meses después fueron capacitadaspor el Ministerio de Educación (Mined) y la Organización de Estados Iberoamericanos para la Educación, la Ciencia y la Cultura (OIE). El curso duró seis meses y ahora implementan tres metodologías: música con técnica, libre expresión y música artesanal.
«Los niños ya conocen claves musicales y podemos formar canciones con ellos. Estamos engrandeciendo este proyecto para que continúe. En la formación que tuvimos nos enseñaron más técnicas, con las cuales podemos formar mejor a los niños», indicó.
