El cuestionado multimillonario estadounidense George Soros está en proceso de ceder el control de su imperio económico a su hijo Alexander Soros, quien en particular quiere luchar contra la posibilidad de un regreso del magnate republicano Donald Trump al poder, según el diario The Wall Street Journal (WSJ).
A los 92 años, George Soros se dispuso a pasar las riendas de su organización a uno de sus hijos, Alexander, de 37 años.
George Soros comenzó a crear en la década de 1980 una red de fundaciones (Open Society Foundations u OSF) que invierte en todo el mundo a favor de diversas causas, reformas económicas y judiciales.
En América Central, la Open Society Foundations realiza donaciones a medios digitales como El Faro, Revista Factum, y Gato Encerrado (El Salvador), el diario nicaragüense Confidencial, el medio de Guatemala, Plaza Pública, y otros. En Costa Rica ha dado apoyo a organizaciones pro matrimonio igualitario. El medio digital Nómada, de Guatemala, rechazó continuar recibiendo fondos de Soros al denunciar intromisiones en su línea editorial y decidió cerrar.
En una entrevista con el WSJ publicada el domingo, Alexander Soros explicó que es «más político» que su padre y que le preocupa la idea de que el expresidente Trump (2017-2021) pueda ser reelegido a la Casa Blanca en 2024.
«Me encantaría ver que el dinero no jugara un papel tan importante en la política, pero mientras la otra parte lo haga (por medio de contribuciones), vamos a tener que seguir haciéndolo también», dijo al diario.
Bajo su liderazgo, la OSF debe continuar por el mismo camino, pero ahora añadiendo también otras causas como el derecho al aborto o la igualdad de género.
Alexander Soros fue elegido presidente de la junta directiva de las fundaciones en diciembre y ahora dirige las actividades políticas agrupadas en el denominado «súper PAC», una estructura que desembolsa fondos para las campañas de los candidatos políticos en liza.
Es el único miembro de la familia que forma parte del comité de inversiones del Soros Fund Management, la entidad que supervisa los fondos filantrópicos, según el WSJ.
La mayor parte de los $25,000 millones con los que está dotado se destinarán a la OSF en los próximos años y $125 millones fueron destinados al súper PAC.
Soros hijo dijo que quería involucrarse más en la política de Estados Unidos que su padre. Apoya los programas que alientan a los votantes latinos y afroestadounidenses a votar y pide a los legisladores demócratas que tenga más interacción con sus electores.
«Nuestras filas deben ser más patrióticas e inclusivas. El hecho de que alguien vote por Trump no significa que esté perdido o sea racista», alegó.