Marcelo Arévalo admite que la tristeza afloró al calor de la derrota en la final de doble mixtos del US Open, pero ya en frío el máximo exponente del tenis salvadoreño está consiente que ha sido un «paso inmenso» el que ha dodo en su carrera profesional al conseguir la plata en un Grand Slam. E incluso le abre la esperanza que tiene madera para repetir la hazaña y por qué no, conseguir un título en estas lides. Ayer, el tenista recibió un reconocimiento económico por parte del Indes y concedió unos minutos a «Diario El Salvador».
Después de jugar una histórica final en el US Open, ¿cómo han sido tus días?, te han sobrado las felicitaciones imagino.
Mirá, la verdad sí. Obviamente ha sido algo nuevo para mí, nunca había experimentado tantos saludos, tantos mensajes de motivación. Y la verdad te digo que me sentí muy contento, muy motivado, cuando recibí tanto las felicitaciones de Yamil {Bukele] como la de nuestro presidente Nayib en las redes sociales. Eso antes no lo había experimentado en mi carrera y son cosas que te motivan para seguir adelante. Que nuestro propio presidente se tome el tiempo para mandarte las felicitaciones yo creo que eso demuestra la importancia de el deporte para este Gobierno. La verdad es que han sido días espectaculares y van a ser recuerdos muy bonitos. Ojalá que pueda vivir esto nuevamente, poder llegar a la final de otro torneo Grand Slam.
Iniciaste profesionalmente en singles, ¿en qué momento decidiste enfocarte en dobles?
Bueno yo siempre jugué dobles, pero me comencé a enfocar en la rama de dobles hace unos tres años atrás. Ahí fue cuando yo decidí jugar nada más dobles, quedarme con dobles. Mi sueño en este deporte siempre fue jugar los torneos más grandes, los torneos más importantes, pararme en los escenarios más grandes de este deporte y yo vi que en dobles estaba teniendo muy buenos resultados y aproveché esos resultados que iba teniendo para jugar los mejores torneos de nuestro deporte.
¿Fue eso lo que te hizo dar el giro?
Sí. Uno como atletas a nivel profesional siempre quiere llegar a lo máximo. Si yo hubiese decidido ser de otro deporte, yo siempre hubiese querido competir al máximo nivel y en el tenis me di cuenta que por la pasión que yo tenía por el dobles podía lograrlos y gracias a Dios se logró.
En este momento estás 37 en el ranking, ¿en qué posición del ranking te proyectas cerrar este año?
Me encantaría poder cerrar entre los mejores 30 del mundo. Ese sería un logro increíble. Estoy tan cerca que yo creo que en los próximos seis torneos si tenemos buenos resultados se puede lograr. Mi objetivo para terminar el 2021 en la casilla 30 o mejor.
¿Qué posibilidades hay que puedas disputar el Torneo de Maestros?
Ahorita estamos ubicados en la casilla número 15 como pareja. Posibilidades hay, obviamente cuando ya faltan seis torneos y solo clasifican ocho las posibilidades bajan drásticamente, pero si tuviéramos un gran resultado en los dos torneos máster 1000 que quedan que son Indian Wells y París habría todavía una pequeña chance.
Si lo logras sería otro hito histórico para el tenis salvadoreño.
Sí se logra poder llegar a un Máster de Máster sería un hecho histórico. Sería un sueño cumplido para mí, un sueño hecho realidad, pero igualmente si no se logra este año siempre será uno de mis objetivos cada año a partir de hoy el poder jugar un Máster de Máster.
El tenis ha dado innumerables figuras, ¿cuál es el tenista que tu más admiras y por qué?
Yo obviamente fui fan de Roger Federer, siempre me gustó la clase con la que él juega y como se maneja en la cancha. Su actitud dentro de la cancha. Obviamente no digo que es un modelo que yo deba seguir porque nuestro estilo de juego es completamente diferente, pero si es una persona que admiro por su profesionalismo por su buena actitud dentro y fuera de la cancha y por la pasión que tiene. Es una persona que ya tiene casi 40 años, ha tenido dos lesiones graves, está saliendo recientemente de una lesión y ha dicho públicamente que quiere jugar. Obviamente no lo hace por el dinero porque ya tiene muchísimo dinero. Se ve que si lo hace por la pasión al deporte y eso es algo que yo admiro mucho de él.
¿Y en femenino?
En femenino me gusto mucho ahora el estilo de esta chica nueva: Leylah Fernández. De hecho, es amiga mía. Hemos entrenado junto en algunas ocasiones, es muy buena chica, tiene apenas 18 años y con 18 años ya hizo final de un Grand Slam. Me gusta su carácter y entrega en la cancha.
¿Para cuánto tiempo más los salvadoreños tendremos tenis con Marcelo Arévalo?
Creo que me quedan, primero Dios, 10 años, eso es lo que yo me he pronosticado, obviamente siguiendo las líneas: comiendo bien, descansando bien y haciéndome tratamientos para tener el cuerpo libre de lesiones. Yo creo que 10 años más podría seguir dando batalla a nivel mundial.
En lo que llevas de carrera, ¿cuál consideras como la mejor anécdota vivida con algún tenista laureado?
Creo que una de las experiencias más bonitas que tuve fue poder compartir cancha con el italiano Fabio Fognine que ha sido siempre de los mejores 10 del mundo. Jugamos dobles juntos en Cincinnati que es un Máster 1000 y logramos llegar a las semifinales. Lo más bonito de esta anécdota es que logré ver más de cerca cómo entrena, cómo actúa, cómo trabaja, cómo piensa un tipo que está entre los mejores 10 del mundo y la verdad es que aprendí muchísimo durante esa semana.
Para terminar, ¿a tu juicio qué hace falta para que el tenis realmente se desarrolle en el país?
Creo que se está haciendo un buen trabajo por medio de la Federación, se está intentando masificar con los proyectos que se están llevando a cabo. Uno de mis objetivos, de mis sueños, más que lo deportivo es tratar de dejar un legado: que las futuras generaciones de niño tenistas me vean como un ejemplo a seguir y esa es una motivación para mí para seguir escalando puestos en el ranking mundial, porque quiero hacerles saber que así como yo puedo estar jugando estos torneos, puedo llegar a la final de un Grand Slam, puedo estar entre los mejores 35 del mundo, ellos también pueden hacerlo.