Así como Mario Belloso fue entrenado por exguerrilleros para emboscar y asesinar integrantes de la Policía y de la Fuerza Armada, así los mareros recibieron adiestramiento de guerrilla para llevar a cabo estas mismas prácticas: emboscar a soldados y policías para asesinarlos.
El más reciente homicidio de un policía ocurrió el 16 de mayo de este año cuando pandilleros emboscaron al agente Maximino Antonio Vásquez Rodríguez, de 52 años, mientras patrullaba en el cantón El Zapote, municipio de Nueva Concepción, Chalatenango. A raíz este este crimen fue instalado un cerco de seguridad con 5,000 soldados y 500 policías que permitió capturar más de 60 mareros de una estructura de la MS, incluyendo, tres implicados directos en este asesinato.
El 13 de julio de 2022, el soldado David Ernesto Álvarez Decorado murió en un ataque armado terrorista cuando brindaba seguridad en el cantón Laguna Seca de Nueva Concepción, Chalatenango. El militar, de 28 años, estaba destacado en la Cuarta Brigada de Infantería y aunque fue auxiliado perdió la vida en el Hospital Militar.
El 11 de junio del año pasado se registró un ataque armado de pandilleros hacia una tropa de la Fuerza Armada que patrullaba en las montañas del caserío El Izcatal, municipio de San Isidro, departamento de Cabañas. En esa ocasión el casco de seguridad que portaba un sargento del Comando de las Fuerzas Especiales le salvó la vida al protegerlo de un disparo de fusil AK47.
A partir de estos hechos, las autoridades concluyeron que los mareros habían sido adiestrados en el manejo de armas de guerra y para enmontañarse al estilo de la exguerrilla del FMLN. En El Izcatal fueron descubiertos 12 campamentos pequeños de mareros con sus respectivas trincheras.
Ese mismo mes, el presidente Nayib Bukele, dejó al descubierto la intención de las pandillas: mutar a guerrilla para convertirse en partido político, tal como lo hizo el FMLN.
«Las pandillas no se imaginaron que ya sabíamos que intentarían evolucionar en una guerrilla», señaló el mandatario.
Fue bajo el primer gobierno del FMLN, como parte de la tregua que les facilitó Mauricio Funes y que ejecutó el exministro David Munguía Payés, que se permitió el entrenamiento de pandilleros en polígonos de tiros de la Fuerza Armada.