Comentarios positivos y negativos son los que han surgido en diferentes sectores, desde que se anunció el acuerdo entre el Gobierno salvadoreño y una de las cuatro farmacéuticas que proporcionará 2 millones de vacunas contra la COVID-19.
Sin embargo, diferentes profesionales de la salud aseveran que, si bien es cierto que la vacuna fabricada por AstraZeneca, en conjunto con la Universidad de Oxford, es prematura en referencia con el tiempo de estudios necesarios para que un fármaco cumpla con los estándares óptimos, es importante que este avance para frenar la COVID-19 sea aprovechado cuando ya esté avalado por los organismos regulatorios.
«Esta es una vacuna de emergencia, que ha sido aprobada bajo ciertos criterios diferentes de cómo se aprueban las otras vacunas, en las cuales se tienen años de investigación para llegar a sacarla a comercialización masiva. Lo que sucede es que ahora estamos en un momento de la vida humana diferente, porque mucha gente está enferma, mucha gente ha muerto», manifestó la doctora Margarita Rodríguez.
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Además, aseguró que la población debe estar consciente de la situación que no solo el país sino el mundo entero está viviendo, y el riesgo latente de contraer la enfermedad que ha cobrado la vida de 1,509,544 personas a escala mundial, según datos recopilados en el sitio web de la Universidad Johns Hopkins.
«Vacunarse es un riesgo, enfermarse es un riesgo. Hay que tener en cuenta que, aunque uno se vacune, siempre tiene que seguir con los cuidados, porque ninguna vacuna es 100 % efectiva. Es de tomar en cuenta estos factores para vacunarse o para tomar la decisión de no hacerlo. Yo en lo personal me voy a vacunar, vamos a probar la vacuna», detalló la doctora. Por su parte, el infectólogo Mario Gamero enfatizó en la importancia de la aplicación de la vacuna, partiendo del hecho de lograr una completa inmunización que permita cortar la transmisión del virus de persona a persona.
«Es importante que también sepa la población que, si algunas personas se vacunan y otras no, pues existe la dificultad de cortar la transmisión de persona a persona, ya que no se puede terminar completamente [la inmunidad] como otras vacunas han logrado casi erradicar definitivamente algunas enfermedades infecciosas. Si la población no recibe totalmente esta vacuna, pues lógicamente no se alcanzaría la protección adecuada», recalcó Gamero.
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A la vez, se refirió a las ventajas de la vacuna, que se prevé llegue al país en los primeros meses de 2021, entre los que se destaca la logística del transporte. «No requiere de refrigeración sofisticada como las otras vacunas, las cuales podrían necesitar un aditamento especial para guardarlas y congelarlas a -20 grados Celsius», destacó.
Una opinión similar sostuvo el también infectólogo Iván Solano, en el espacio de la entrevista República, al referirse a las ventajas del fármaco en estudio. «Estamos ante buenos augurios que pronto podamos tener las vacunas, pero necesitamos que ellas sigan la validación de los entes reguladores respectivos.
La vacuna de AstraZeneca tiene la ventaja en cuanto a que puede almacenarse, transportarse y manipularse por seis meses», manifestó Solano, a la vez que enfatizó que la vacunación es una de las estrategias de seguridad pública de mayor impacto.
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No obstante, el doctor Gamero instó a la población a informarse adecuadamente en el tema de las vacunas. Además recomendó continuar con la implementación de todos los protocolos establecidos por el Ministerio de Salud (Minsal), «hasta que tengamos la vacuna, de manera que se puedan disminuir los riesgos de contagios, sobre todo, en la población vulnerable», dijo.
