Para muchos estudiantes salvadoreños la entrega de computadoras que lleva a cabo el Gobierno de El Salvador, por medio del Ministerio de Educación (Mined), es una puerta que les permitirá romper la brecha digital, facilitar sus estudios y apoyar la economía familiar.
Este es el caso de Jénifer Mejía, una estudiante de primer año de Técnico en Contaduría del Instituto Nacional del Puerto de La Libertad, quien recibió la computadora hace un mes. Esta herramienta tecnológica le ha permitido llevar a cabo sus estudios diarios y agilizar el proceso de aprendizaje en casa.
«Gracias a Dios me ha ido muy bien desde que recibí la computadora. He sentido un gran cambio. Le estoy dando el uso adecuado. Mis papás tienen menos gastos, ya que ellos me pasaban saldo para tener internet. La computadora era la herramienta que necesitaba para continuar mis estudios y para entregar cada una de las tareas», detalló.
La joven expresó que en este tiempo ha aprendido a usar la herramienta tecnológica brindada por el Ministerio de Educación. «Sin una computadora, antes no me hubiera imaginado hacer gráficos, cuadros contables y todo lo que ahora puedo hacer», compartió la joven.
Anteriormente, Jénifer tuvo dificultades para estudiar, recibir las clases, hacer y enviar las tareas. En muchas de las clases no pudo estar presente, ya que no contaba con una computadora y, cuando tenía un celular, en ocasiones no tenía saldo o internet.
«Se me hacía muy difícil recibir las clases, ya que no tenía celular; entonces, me tocaba pedirles prestado el teléfono a mis papás o a otros familiares para lograr entregar las tareas. A veces no me podía meter a las clases, porque no teníamos el dinero para comprar los paquetes de internet. Otra de las dificultades era cuando se iba la señal. Como vivimos en la costa, muchas veces la señal es bien débil», expresó.
Mejía explicó que el paquete de internet que el Mined incluye con la computadora se ha convertido en un ahorro para su familia, ya que antes debían apartar cierta cantidad de dinero al mes para ese fin.
«Somos una familia de escasos recursos, con ingresos mínimos. A mis papás se les hacía difícil ponerle saldo al teléfono, y al mes tenía que recargar hasta $15 para cubrir todas las clases. Como en todo trabajo, ellos tienen días malos y buenos. A veces, era más importante comprar otras cosas que el internet. Ahora que nos dan los paquetes. Con ese dinero que gastábamos, ahora lo podemos utilizar en comida o en otras cosas necesarias en la casa», dijo.
Tomasa Rivas, madre de la joven, expresó que las computadoras y los paquetes de internet se han convertido en un apoyo para su economía. «Cuando no podíamos recargar para la semana, íbamos poniendo $1 cada día o lo que tuviéramos de dinero. Aunque fueran $0.50, se los metíamos de internet. Todo para que ella pudiera recibir sus clases y enviar sus tareas», recalcó.
Rivas agradeció al Gobierno por este apoyo para los estudiantes, y aseguró que este es un paso importante para la educación de la juventud salvadoreña. «Ahora que mi hija ya tiene la computadora me siento feliz, ya que está haciendo sus tareas en la casa, tranquila, y se puede desenvolver en áreas que anteriormente hubiese sido difícil. Ahora, con la tecnología, se le facilitan sus estudios y es un gran aporte para la juventud del país», dijo.
Por su parte, Jénifer desea obtener una beca, ir a la universidad y convertirse en arquitecta.
«Quiero crecer profesionalmente, por lo que debo seguir adelante y echarle ganas al estudio para llegar a la universidad. Cuando me gradúe de bachillerato, mi deseo es optar por una beca, ya que somos una familia de escasos recursos económicos, pero para eso me estoy esforzando en mis estudios», apuntó.