Que el distrito de Guadalupe, en San Vicente Sur, sea referente de la cultura del café de especialidad es el objetivo que busca Millian Reynaldo Torres Rivas y su familia, quien desde hace seis años, aproximadamente, puso en marcha su proyecto de caficultura de la cordillera Chichontepec que, según comentó, ya está dando resultados.
Se trata de su emprendimiento Polo Café, el cual aseguró que para llevarlo a un nivel especial requiere inocuidad en la producción, es decir, características biológicas en el terreno y las que rodean el medioambiente de este.
Para las prácticas encaminadas a desarrollar un café de especialidad tomó la decisión (en 2018) de cambiar el parque cafetalero, que tenía 75 años. «Lo boté todo, renové el 100 % de las plantas, y así he venido desarrollando el café», añadió el emprendedor.
«Quería algo especial y para sacar un café especial tiene que reunir muchos requisitos de inocuidad en las parcelas y en el proceso», dijo.
Agregó que decidió seguir investigando y aprendiendo más sobre el tema, por lo que en la pandemia de la COVID-19 se inscribió en un diplomado con una empresa colombiana sobre «Procesos de fermentaciones controlados dentro de la inocuidad en el café».
«En ese momento tenía un puntaje del laboratorio del Consejo Nacional del Café; mi café lo había catado con 77 puntos. Después con las pruebas y los errores de la fermentación, he logrado llegar con mi café a los 87 puntos, 10 puntos más», comentó sobre los valores de su producto, puntaje que lo acredita como café de especialidad.
En su cafetal, de un poco más de una manzana, desde hace tres años comenzó a obtener cosechas en crecimiento, no hace prácticas dañinas contra el ecosistema, no utilizando, por ejemplo, glifosatos ni herbicidas en la parcela, una apuesta al café orgánico.
Lograr un café de especialidad además tiene que ver con la forma de recolección de la uva, pues solo debe incluirse la madura, por tanto, se hace un proceso de clasificación tanto al cortar como al momento de colocarla en las camas africanas. «En el café especial no lleva verde ni amarillo, solo el que se encuentre entre los 18 y 23 grados brix de azúcar en el grano», ejemplificó.
Millian destacó que el emprendimiento Polo Café fue creado bajo el principio de solidaridad con el medio ambiente.
Manifestó que su sueño es que haya más caficultores en pequeño como él, que se incluyan en procesar café, así como contar con una cafetería en
Guadalupe.