Su abuela se encuentra con cáncer en fase terminal, y él desea pasar con ella sus últimos días, pero no podía hacerlo sin estar vacunado contra la COVID-19, cosa que su padre le impedía.
Así es la historia de un niño de 12 años de la ciudad holandesa de Groningen, que tuvo que enfrentar una batalla judicial para poder vacunarse a pesar de las negativas de su padre.
De acuerdo con la publicación de BBC News, un juez emitió el fallo a favor del niño, lo cual le permitirá recibir su dosis y poder visitar a su abuela, que padece un cáncer avanzado.
En Holanda, según afirma el medio, las leyes determinan que, si dos padres no pueden ponerse de acuerdo sobre los intereses de su hijo, menor de edad, un juez debe dictaminar la decisión final.
Así fue como el juez Bart Tromp dictaminó que el menor debe ser vacunado cuanto antes, debido a que su interés de pasar más tiempo con su abuela es más importante que las preocupaciones de su padre, quien asegura que las vacunas se encuentran en fase de prueba, y suponen «un riesgo para los órganos reproductivos».
Tromp aseguró que no hay base científica para esas preocupaciones, y gracias a ello, el niño podrá compartir con su abuela, «en la última etapa de vida» debido a que sufre un cáncer de pulmón con metástasis.