El titular del Ministerio de Salud, Francisco Alabí, supervisó esta tarde la atención médica que están recibiendo los dos niños que resultaron con graves quemaduras luego de la explosión que se produjo en un restaurante de comida rápida ubicado en las cercanías del Mercado Central de Santa Ana.
Los menores son atendidos por un grupo de médicos en el Hospital Nacional de Niños Benjamín Bloom. Uno de los menores, de apenas tres meses de edad, presenta una quemadura grave en su nariz y quemaduras de segundo grado en el 15% de su cuerpo.
El ministro Alabí explicó que el menor de tres meses se encuentra estable y está siendo evaluado por un equipo interdisciplinario de médicos. El otro niño, de siete años, tiene igual gravedad de lesiones por la explosión en el 6% de la superficie de su cuerpo, además de una quemadura leve.
«En este momento también se encuentran evaluando al hermano, un paciente menor de edad que tiene una quemadura de cerca del 6% de superficie corporal, es una quemadura leve», señaló el funcionario.
Los datos preliminares de la explosión señalan que al menos 23 personas resultaron lesionadas, en su mayoría de quemaduras; de momento hay tres personas en condiciones críticas. Las víctimas con heridas más graves fueron atendidas por Comandos de Salvamento, y fueron trasladadas a la sala de emergencia del Hospital San Juan de Dios.
Bomberos de El Salvador, manejó preliminarmente que en el lugar del accidente se estaba suministrando gas propano. Por otra parte, la institución aseguró que más de 30 puestos instalados en los alrededores sufrieron daños debido a la explosión.