El ministro de Salud, Francisco Alabí, detalló esta mañana durante la entrevista Frente a Frente que los niños y mujeres embarazadas no serán vacunados contra la COVID-19, únicamente será aplicada a personas de 18 años en adelante.
«La vacuna tiene sus indicaciones, precisamente los niños no es un grupo poblacional que se le va a colocar la vacuna. Arriba de los 18 años es el inicio de la aplicación no así a mujeres embarazadas ni personas que tengan enfermedades complicadas», aseveró el funcionario.
De igual manera, explicó que para la aplicación del fármaco se le dará prioridad al personal de primera línea, de los cuales hay 50,000 recursos directos (personal de salud) en el manejo de la pandemia y 60,000 en los que están inmersos elementos de la Fuerza Armada y Policía Nacional Civil (PNC).
En segundo lugar, están las personas mayores de 50 años, de las cuales, las autoridades prevén sean aproximadamente 1.4 millones de adultos que serían inmunizados contra el virus; y especificó que, a pesar de ser un grupo menor, este segmento representa el 90 % de las letalidades en el territorio por COVID-19.
De igual forma, se vacunarán aproximadamente 750,000 personas correspondientes al grupo de 18-50 años que padecen enfermedades crónicas como diabetes hipertensión, entre otros. Y finalmente, será intervenida la población joven sin enfermedades.
Alabí recalcó que, si bien aún no hay una fecha específica de llegada de la vacuna a El Salvador, se prevé sea durante el primer trimestre del 2021, y que su aplicación se realizará con base a tres principios: universal, gratuita y voluntaria.
«Queda evidenciado que ha habido un plan y una estrategia que está dando resultado y queremos cerrar con broche de oro el manejo de la pandemia», manifestó el titular del Minsal.
Asimismo, explicó que se cuenta con un plan logístico para que la población tenga acceso a la inmunización, el cual comprende 100 centros de vacunación que estarán distribuidos en: 68 unidades de primer nivel de atención, 18 hospitales de la red nacional, 12 unidades del Instituto Salvadoreño del Seguro Social (ISSS) y dos unidades de sanidad militar.
Ante esto, el ministro expresó que estas acciones vienen a fortalecer al sistema de vacunación del país el cual «es quizá el más fuerte en Centroamérica, y me atrevería a decir que uno de los más robustos en América Latina», puntualizó.