Este martes, la comisión disciplinaria de la Fesfut se reunió para discutir sobre los hechos de violencia que ocurrieron el domingo, en carretera, luego del partido entre Firpo y Alianza, en el estadio Sergio Torres, del Usulután, por la fecha 15 del Apertura 2021. Tras ese juego, hubo aficionados de Firpo que interceptaron el bus de Alianza y luego quebraron los vidrios delanteros de ese automotor.
Pero esa comisión auxiliar de la Fesfut, la única facultada para este caso, no recolectó elementos suficientes para poder sancionar a los involucrados. Este medio conoció que los integrantes de ese cuerpo colegiado no tuvieron información sobre dónde se había perpetrado el ataque al bus del plantel capitalino. Pero eso no significa que las investigaciones de la Policía Nacional Civil no seguirán su curso.
De acuerdo con el gerente de Alianza, Edwin Abarca, el atentado del domingo fue el tercero que sufre el plantel albo, en los últimos años. Según Abarca, afortunadamente, solo hubo daños materiales, que tendrán un costo de $1,500 a $2,000.
A parte de ese hecho bochornoso de parte de los hinchas taurinos, los albos tuvieron que soportar su segunda derrota en el Apertura, ante la caída por 2-1 ante Firpo.