Norma Lobo, ingeniera agrónoma y directora del Centro de Desarrollo de la Pesca y la Acuicultura (Cendepesca), del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), ha trabajado por más de ocho años por el bienestar del sector pesquero, acuicultor y comerciantes de mariscos.
Es hija de padre jornalero y de una ama de casa. Creció con ocho hermanos -seis mujeres y tres hombres- en el cantón Andalucía, uno de los cantones más pequeños del municipio de Ciudad Arce, en La Libertad.
La directora indicó que toda su carrera como agrónoma fue pagada con becas, ya que su familia era de bajos recursos, pero siempre quiso salir adelante.
Norma conversó con Diario El Salvador sobre sus planes de trabajo al frente de Cendepesca.
¿Cuándo llega a MAG?
Mi plaza fue aprobada el 1 de marzo de 2012 y empecé en Cendepesca como inspector, uno de los cargo más bajos en la institución. Me encargaba de hacer inspecciones a embarcaciones artesanales e industriales en alta mar, para que no maten las tortugas, y tratar el contrabando de pescado.
En La Libertad estuve desde 2012, y pude constituir cooperativas, trabajar proyectos de fidecomiso o entidades que querían apoyar al sector.
En 2016 empecé a pedirle a las jefaturas que me dieran la oportunidad de ascender, pero la respuesta que me dieron fue que yo no podía porque era mujer y tenía poco tiempo en la institución.
¿Cómo ha sido trabajar en un área pensada para hombres?
Cuando el ministro del MAG (Pablo Anliker) me dijo que iba a tener esta dirección para mí fue gratificante. En un inicio me pidieron que fuera Ad Honorem, porque lo que él quería era que una mujer tomara un puesto tan importante y que específicamente que fuera alguien con experiencia.
En ese momento me dio un poco de miedo, porque sabía cómo quedaba la dirección. Había deudas, no teníamos dinero y el equipo estaba dividido. Siendo mujer, el ministro me puso toda la confianza. No tenía un mes de haber empezado Ad Honorem cuando él ya me había dado mi plaza como directora.
Yo nunca busqué ser la directora, ni mucho menos que un ministro me tomara en cuenta para este cargo.
¿Cuáles son algunos proyectos a futuro?
Lo que pensamos es hacer un proyecto que se va a llamar Limpiando los Océanos, donde los mismos barcos industriales van a arrastrar todo lo que es la basura para limpiar el mar. Buscamos que se vea que ellos no solo son destructores, sino que apoyan a la fauna.
También queremos hacer un cambio de flota y que no sea únicamente de camarón, sino que otros barcos se puedan enfocar en los langostinos y otras especies migratorias.
Con el sector pesca artesanal estamos trabajando muchos proyectos de fideicomiso y estamos apoyando mucho a las cooperativas. Con el sector acuicultor hemos gestionado más de 100 permisos que estaban estancados desde hace más de 10 años.
Hemos logrado abrir seis plantas de productos, dos que se encargan de tilapia que principalmente se exporta a Guatemala, y se vende en los supermercados nacionales.
¿Cuál es la apuesta al sector?
Mi meta es que el sector, desde que yo llegué a esta dirección, ya no sea marginado. Apostarle a cuidar la productividad y el manejo de ésta, pero también ver de qué manera se trabaja con otras especies que están dentro de nuestros mares y que no están comercialmente con la atención debido.
También buscamos tener un mercado nacional de mariscos, que ya no esté solo la Tiendona. Yo quiero hacer un mercado nacional en San Salvador, Santa Ana y San Miguel. Además, seguir en la cadena de frío, darles capacitaciones en la cadena de inocuidad y de cómo tratar el producto.
¿Cuáles son las proyecciones para 2021?
Buscamos seguir trabajando con ellos, porque son quienes nos dan las herramientas de cómo hacer el trabajo. También, uno de los proyectos principales es ver cómo inyectamos más mano de obra a la dirección, contratando a más personal y mejorando los servicios.
¿Cuál es la finalidad de Norma en Cendepesca?
Nosotros lo que buscamos es que el pescador se sienta seguro y así como sale así va a regresar. Que se den cuenta que no somos una dirección que manda, sino una que quiere trabajar de la mano con ellos.
¿Cómo está el sector actualmente?
El sector está dando mucho rédito económico, generando empleo y sobre todo que muchas familias puedan cultivar camarón, tilapia y viveros de casco de burro y de concha.
¿Qué es Cendepesca para usted?
Es mi casa. Para mi significa una unión entre los sectores y yo, nos hemos transformado en una familia. Ya me metí a los siete mares, fue algo que me absorbió y ahora no quiero irme, ya que estando acá me di cuenta del amor que tengo por hacer las cosas que el sector necesita.
En mi pensamiento siempre está dejar a un sector pesquero siendo uno de los más fuertes. Ver cómo realizan su trabajo con amor, el hecho de vivir con ellos las pérdidas de todo tipo y trabajar junto con ellos, es lo que me hace seguir adelante.
Nunca les dije que soy licenciada o ingeniera, mucho menos directora. Los pescadores me llaman como ellos quieren, pero siempre guardando el respeto, porque somos una sola familia.