Un enfrentamiento armado al interior de la cárcel de máxima seguridad El Pozo, en Santa Bárbara, Honduras, se registró este miércoles. Siete reos resultaron heridos y según las investigaciones el caos fue provocado por las pandillas que continúan armadas al interior del penal. Periódicos locales reportaron que el tiroteo se prolongó por varios minutos.
Honduras anunció este martes el desarme de los presos y el bloqueo de señales telefónicas, entre otras acciones, para pacificar las cárceles, después de que hace unas semanas se desataran reyertas a tiros en cuatro penales.
La viceministra de Seguridad, Julissa Villanueva, nombrada por la presidenta Xiomara Castro para intervenir las prisiones, anunció que una de las medidas será el «desarme real a través de registros manuales y electrónicos permanentes en el 100% de las instalaciones».
El sistema carcelario sigue como un terreno difícil de controlar para el Gobierno hondureño. Según las autoridades, cabecillas del crimen organizado ordenan desde las cárceles extorsiones, secuestros, sicariato, operaciones con drogas y otros delitos. Honduras se propone reubicar a reclusos de las cuatro prisiones con mayor población, las mismas donde ocurrieron los enfrentamientos más recientes.