Nueve pandilleros acusados de asesinar a Cristian Joel Quezada fueron trasladado la mañana de este martes de bartolinas policiales a prisiones de Máxima Seguridad situadas en Zacatecoluca, departamento de La Paz, y en Izalco, Sonsonate.
Según el director general de Centros Penales, Osiris Luna, esto es para darle cumplimiento a lo ordenado por el Juzgado Especializado de Instrucción B de San Salvador mientras dure la investigación.
Los criminales que fueron trasladados a cárceles de máxima seguridad son: Jonathan Josué Carpio Méndez, (Jhony); Víctor Manuel Cruz (Piojo); Miguel Alberto García Carpio (Sanyo); Kevin Adonay Mejía Sánchez (Kevin); Máximo Orlando Gámez Gil (Max); Orlando Antonio Quintanilla Campos (Ojos de billar); Nelson Carpio (Mingo). Y los cabecillas
Luis Antonio Anzora Hernández (Niño Mono) y Fredi Mauricio Rogel.
De acuerdo con la información proporcionada por Luna, los criminales le quitaron la vida al joven gestor de cobros creyendo que era integrante de la pandilla rival.
«Hay pruebas robustas para llegar a una condena efectiva de estas personas, los cuales son procesados por el delito de homicidio agravado, robo agravado y agrupaciones ilícitas; debemos destacar la captura de otros siete imputados por este mismo caso», expresó Luna.
El funcionario explicó las condiciones en las que los delincuentes estarán a partir de este momento: «Nosotros los vamos a poner este día tras las rejas en el penal de Máxima Seguridad de Zacatecoluca en donde no van a poder ver el sol nuevamente».
Además, el director de penales advirtió que, «el mensaje categórico a todas las estructuras delincuenciales es que el Gobierno del Presidente Nayi Bukele no va a descansar ni escatimar recursos para poner tras las rejas a quienes actúen para causar zozobra y dolor al pueblo salvadoreño».